La expresidenta Jenine Áñez pidió este martes a la misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que llegó a Bolivia recibir a su hija, Carolina Ribera, con la misma “diligencia” que se reunió con el ministro de Justicia, Iván Lima, para escuchar las denuncias de vulneración de sus derechos.

“Con la diligencia con que se han reunido con el MinJusticia, la expresidenta Constitucional de Bolivia Jeanine Áñez pide a la comisión de seguimiento del informe del GIEI presente en La Paz, que reciba a Carolina Ribera”, posteó Áñez en sus redes sociales administradas por su familia.

El mensaje está acompañado por una carta dirigida por Ribera a la Secretaria Ejecutiva de la CIDH, Tania Reneaum, al Comisionado CIDH Relator Joel Hernández y al responsable del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), Jaime Vidal.

En la misiva le enumera los temas que pretende tratar: 375 días de encarcelamiento de Áñez, juicio ordinario contra una expresidenta, “multiplicación de procesos”, eliminación del delito de sedición y “hostigamiento, violencia contra familiares, incomunicación con familiares y allegados”.

Según el convenio firmado este martes, la CIDH hará un seguimiento al cumplimiento de las recomendaciones hechas por el GIEI a la conclusión de la investigación sobre los hechos de violencia y muerte ocurridos durante la crisis de 2019.

Reneaum consideró que es necesario “sanar las heridas que dejaron (los conflictos de) 2019” y para que “no se repitan los hechos de violencia violación de derechos humanos”.

Entretanto, el comisionado de la CIDH para Bolivia explicó que la mesa técnica —que trabajará dos años— implicará un “punto de encuentro entre el Estado, las víctimas y la sociedad civil” para la reparación de daños a los derechos humanos, que, en su criterio, en 2019 alcanzaron “dimensiones raciales de género”.