Gas neón: el mercado pierde a Ucrania, el principal exportador mundial, a causa de la guerra


Las dos principales fábricas ucranianas, la de Odessa y Mariúpol, están paradas desde que Rusia invadió Ucrania. Algo que preocupa a la industria de los semiconductores.



Por Marie-Pierre Olphand

Ucrania es un actor mayor de la industria de los semiconductores. Antes del inicio del conflicto, el país producía la mitad del suministro mundial de neón. Un gas especialmente importante en la fabricación del láser que se usa para imprimir chips electrónicos.

Por ejemplo, en 2021, Estados Unidos importó el 90% del neón de Ucrania y Alemania, según datos del gabinete de asesoría TechCet, especializado en el suministro de la industria de los semiconductores.

Odessa y Mariúpol, dos fábricas cerradas

Con la guerra, las dos principales fábricas ucranianas situadas en Odessa y Mariúpol (Ingas y Cryoin) han tenido que parar la producción. Nadie puede prever cuándo se va a poder retomar la producción ni cuál va a ser su capacidad.

Desarrollar nuevas cadenas de fabricación en otros lugares no parece ser la solución a corto plazo, porque se necesita una tecnología específica y tiempo para que una fábrica esté operativa. La alternativa para los compradores es buscar otras empresas, sobre todo en China, el otro gran productor de neón.

El problema reside en el precio, porque tanto en el mercado internacional como en el chino, hay una subida enorme. Al igual que en 2014, cuando Rusia se anexionó Crimea, el precio se ha disparado un 600%, según cifras de la comisión americana del comercio internacional.

Las enseñanzas del 2014

Los importadores empezaron ya a diversificar sus fuentes tras el conflicto de 2014 para depender menos de Ucrania. También almacenaron más cantidad de neón. La situación a corto plazo no parece preocupante, pero sí que puede ser un problema a medio plazo, según un experto de AlixPartners.

La curva del precio, sin embargo, no va a invertirse porque el temor a la escasez incita a los importadores a comprar cueste lo que cueste, sobre todo los que no tuvieron la capacidad de almacenar reservas.

Radio Francia Internacional