El Día de la Niña y el Niño en el Estado Plurinacional de Bolivia

  • Algarabía. Niñas y niños festejan su día en la zona de Cala Cala. | Daniel James

Fuente: Los Tiempos

Isabel Rocabado Suárez

Laboratorio de Periodismo Comunicación Social UCB

Los niños bolivianos son acreedores de nuestro reconocimiento, protección y consideración durante todos los días del año. Sin embargo, cada 12 de abril es una fecha célebre del año en que la sociedad puede festejar a los menores y resaltar su rol dentro de la sociedad, como actores en formación del futuro de nuestro país.



Un 12 de abril de 1952, la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) redactaron la Declaración de Principios Universales del Niño, con el objetivo de protegerlos de la desigualdad y cualquier tipo de violencia. Tres años más tarde, en Bolivia, el 11 de abril de 1955, durante la presidencia de Víctor Paz Estenssoro se instauró, mediante el Decreto Supremo N° 04017, el 12 de abril como Día del Niño Boliviano.

En 2013, se abrogó tal decreto y se instituyó el 12 de abril como Día de la Niña y del Niño del Estado Plurinacional de Bolivia, mediante la Ley N° 357 del 13 de abril, que en su artículo segundo estipula que el Estado es responsable de garantizar y velar por la igualdad y cumplimiento de los derechos fundamentales de la niña y del niño de acuerdo a lo estipulado en la Constitución Política del Estado (CPE).

Esta fecha se instauró en ambas ocasiones con un común denominador, con el objetivo de visibilizar la situación de las niñas y niños bolivianos, sus necesidades y los medios que requieren para ejercer sus derechos en igualdad y de forma integral, según lo estipulado en la CPE. Asimismo, es preciso que la sociedad en general dé cumplimiento y garantice los derechos de las niñas y niños, con una cultura de buen trato y conciencia social.

En agosto de 2001, varios representantes de todos los departamentos de Bolivia se reunieron en el Primer Encuentro Nacional de la Alianza Boliviana con la Niñez y Adolescencia (ABNA), donde se pudo recopilar un decálogo nacional de derechos fundamentales para el desarrollo de los niños y niñas bolivianos. Dichos derechos figuran en los artículos del 58 al 60 y en su vínculo con la educación, desde el artículo 78 al 85, de la CPE Plurinacional de Bolivia.

En el artículo 59, figura que toda niña, niño y adolescente tiene derecho a su desarrollo integral, de vivir y crecer en el seno de una familia (ya sea de origen o adoptiva) y de tener una identidad y filiación. De igual manera, se menciona que el Estado y sociedad tienen la obligación de garantizar la protección, promoción y activa participación de las jóvenes y los jóvenes en el desarrollo productivo, político, social, económico y cultural, sin discriminación alguna, de acuerdo con la ley.

En el artículo 60, se indica que es deber del Estado, la sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés superior de la niña, niño y adolescente, que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios públicos y privados, y el acceso a una administración de justicia pronta, oportuna y con asistencia de personal especializado.

Por otra parte, en nuestro país existen instituciones cuya principal obligación es otorgar un servicio permanente y gratuito a las niñas, niños y adolescentes, además de sus padres o tutores, cuando requieran de información y ameriten realizar denuncias en torno a la vulneración dirigida hacia los sujetos de derecho, en este caso, las niñas, niños y adolescentes.

Entre algunas de estas instituciones están los servicios departamentales de gestión social, centros de acogida, defensorías y comisiones municipales de niñez y adolescencia, policía boliviana y brigadas de protección a la familia.

Del mismo modo, Giovanna Andrade, licenciada en Ciencias de la Educación y dedicada a la enseñanza del nivel inicial desde hace 11 años, nos recuerda que “no sólo el 12 de abril es el Día del Niño, debería ser todos los días. También (hay que) recordar que, como son niños, ellos tienen sus derechos, pero también tienen sus obligaciones y sus deberes. Todo derecho conlleva una obligación, que si ellos están en el kínder o en el colegio, reconozcan que su derecho es la educación, pero su deber es cumplir con las tareas establecidas, con las normas de respeto y las normas de la institución; que si tienen el derecho de tener una familia, comprendan la obligación o el deber que tienen para con la familia que es ayudar, apoyar, respetar y amar. No olvidemos que todos los niños son el futuro del mundo y está en nuestras manos como adultos hacerles sus días felices, haciéndoles entender que hay momentos buenos y malos y que ambos los ayudan a crecer”.

Para finalizar, María Luz Torrico, maestra normalista del nivel inicial y dedicada al servicio de la educación desde hace 43 años, nos indica que para festejar a los más pequeños de la casa este 12 de abril, debemos “darle mucha alegría de parte de su familia, de las personas que están a su alrededor. Comprenderlo y hacerlo sentir que es un niño sano y fuerte”.

Asimismo, aclara que en todo momento “el niño necesita especialmente del tiempo que precise para poder asimilar, de la paciencia y la escucha”.