4 jóvenes de Achacachi se destacan en pasantías productivas con la CAO

Los estudiantes aymaras del Instituto Tecnológico Jach’a Omasuyos (ITJO) de Achacachi hicieron prácticas en empresas de Santa Cruz y causaron una gran impresión. Otro grupo partirá a fin de año.

Fuente: paginasiete.bo



Jorge Quispe / La Paz

Abel Rodrigo Huarachi Mamani, Marcos Roque, Jenio Bautista e Irma Huanca Quispe, cuatro jóvenes estudiantes aymaras del Instituto Tecnológico Jach’a Omasuyos (ITJO) de Achacachi, sacaron una nota alta en las pasantías productivas que realizaron en empresas de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), en Santa Cruz, al punto que ya quisieron contratarlos para labrar su profesión en esa región.

“Definitivamente hallamos jóvenes brillantes que al final de las pasantías ya tenían ofertas de trabajo, pero primero deben terminar sus estudios y luego volverán. Nosotros pensamos que el mayor capital es el humano, por eso hay que capacitarlos en habilidades específicas”, resume a Página Siete Óscar Mario Justiniano, presidente de la CAO.

El 28 de junio del año pasado, la Cámara y el ITJO firmaron un acuerdo interinstitucional para que sus estudiantes, la mayoría de ellos provenientes de Achacachi, en La Paz, puedan hacer pasantías en empresas productivas de Santa Cruz.

Primer grupo

A fines de 2021, Huarachi y Roque partieron a la capital cruceña para desarrollar sus prácticas en mecánica automotriz en la empresa Toyosato. Mientras que Bautista y Huanca efectuaron sus prácticas en una empresa de alimentos.

“Los cuatro han hecho las prácticas, los han felicitado y les han pedido que se queden en Santa Cruz, pero ellos deben terminar primero sus estudios en nuestro instituto. Los jóvenes ahora están ansiosos por acabar sus estudios y volver a Santa Cruz”, confirmó Guillermo Villavicencio, rector del ITJO.

Según la autoridad, que también viajó a esa región cruceña, los gerentes de las empresas destacaron el empeño, la disciplina y “el hecho de que son fuertes, no son débiles”, contó el académico al referirse a los cuatro aymaras.

Mecánica automotriz

Javier Callisaya, docente de mecánica automotriz del ITJO, informó que Abel Rodrigo Huarachi Mamani y Marcos Roque se destacaron en las prácticas que efectuaron en la empresa Toyosato en Santa Cruz.

Allí, los jóvenes aymaras efectuaron mantenimiento y ensamblaje de maquinarias. “Las prácticas fueron de diciembre hasta marzo. Abel se destacó mucho y tuvo incluso ya una oferta de trabajo, y si bien Marcos tuvo que retornar antes, también causó buena impresión porque ambos se esmeraron”, complementó Callisaya.

Abel terminará este año sus estudios en el instituto y deberá regresar a Santa Cruz. “Ya estamos viendo ahora los perfiles de otros muchachos para que puedan partir a fin de año a tierras cruceñas”, confirmó Callisaya.

En producción de alimentos

Jenio Bautista, nacido en la comunidad de Warisata, e Irma Huanca Quispe, natural del pueblo Ajaría Grande, ambos dentro del municipio de Achacachi, realizaron sus pasantías en una empresa de alimentos, donde al final de esa experiencia también recibieron ofertas de trabajo para quedarse, pero tal como sucedió con Abel y Marcos tuvieron que volver a La Paz para culminar sus estudios en el instituto.

“A ambos les fue muy bien, el gerente de la empresa de alimentos ya les propuso que se queden, pero tuvieron que regresar para terminar sus estudios. Jenio e Irma hicieron prácticas en una la unidad de transformación de alimentos, específicamente en la elaboración de quesos. Algo que ellos ya conocían un poco de este rubro y ahora aprendieron más en Santa Cruz”, contó el docente Iván Poma.

Los dos jóvenes quedaron sorprendidos con la infraestructura de la empresa donde hicieron sus pasantías y si bien sabían algo de quesería, porque Achacachi se caracteriza por esa producción, el haber compartido experiencias en una empresa grande fue para ellos algo inolvidable, dijo el docente Poma.

Huarachi y Roque durante sus pasantías en Santa Cruz. Foto: Abel Huarachi

Irán más jóvenes

El ITJO pretende enviar otros cuatro muchachos a fin de año para que aprendan más sobre esta especialidad productiva. “Hay una sed de conocimiento, por eso al final del año definiremos los nombres de otros cuatro”, precisó el académico.

Villavicencio confirmó que en esta primera parte del acuerdo interinstitucional con la CAO se tiene previsto mandar a 12 estudiantes con cuatro objetivos: pasantías, inserción laboral, capacitaciones virtuales y visita a las empresas en Santa Cruz.

Justiniano, presidente de la CAO, confirmó que junto a la Profin, una empresa sin fines de lucro, se organizó una capacitación en educación financiera en el Centro de Formación Agropecuaria de dicha Cámara. Mientras que con el asesoramiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se organizan cursos de formación productiva no solo en Santa Cruz, sino también en otras regiones a través de plataformas virtuales en producción de quinua, banano e incluso en la crianza del ganado camélido en el altiplano.

“Nosotros no tenemos limitantes ni ideológicas ni sociales, porque lo que tenemos que entender es que todos somos productores y así nos tenemos que ayudar”, sintetiza Justiniano, quien el pasado año se puso un poncho rojo en Achacachi a la hora de firmar el convenio interinstitucional con el ITJO, mientras el Villavicencio lucía un sombrero de saó, una señal de integración en busca de días mejores para la actividad agropecuaria en todo el país.

Hallamos jóvenes brillantes que al final de las pasantías ya tenían ofertas de trabajo, pero primero deben terminar sus estudios

Óscar Justiniano, CAO

12
ESTUDIANTES
irán en esta primera etapa
para hacer prácticas en
empresas de Santa Cruz.

Fuente: paginasiete.bo