El caso de Max Mendoza ya saltó hacia los catedráticos y los clanes familiares dentro las universidades.
Fuente: El Deber
El MAS pedirá una investigación contra todos los docentes que hubieran ejercido la docencia universitaria sin contar con un título académico, así adelantó el diputado cochabambino, Héctor Arce, quien dijo que será “inflexible” en este caso; pero cuando los periodistas le preguntaron si esa investigación debía incluir al ex vicepresidente, Álvaro García Linera, el legislador matizó su respuesta.
“(Se investigará) a todos los que han ejercido el cargo de docente como corresponde. Una cosa es ser docente regular de una universidad y pueden ingresar por méritos, por examen, o ser invitados, otra cosa es dar charlas cursos temporales, eso tiene otro tratamiento”, dijo el diputado para salir del paso.
En 2016 se informó que el entonces vicepresidente del Estado, Álvaro García Linera, no obtuvo ningún título académico en la universidad mexicana y tampoco tuvo uno de la UMSA, sin embargo, dictó cátedra durante años en la universidad paceña.
El conflicto de las docencias y universidades saltó a la luz pública luego que supiera que el máximo dirigente estudiantil de la universidad boliviana, Max Mendoza, era un universitario de 52 años, con 30 años en las aulas y sin haber obtenido ningún pergamino.
Este miércoles, el diputado Héctor Arce (MAS) relató que recibió información sobre los catedráticos de universidades, quiénes en varios casos, habrían ejercido el cargo sin un título académico que los respalde, tal como mandan las normas internas de las casas de estudios superiores.
“Actualmente, en una facultad en Cochabamba, el decano es el papá, la esposa es docente y ha logrado incorporar al plantel docente a dos hijos, llama la atención, todo esto vamos a investigar, se va a esclarecer, necesitamos saber, para que con estos hechos la universidad tome conciencia”, exhortó el legislador.
El legislador oficialista evitó responder si es que los docentes que dieron clases sin tener el aval legal tendrían que devolver el dinero que percibieron como profesionales, solo dijo que pidió información a las 11 universidades que conforman el sistema universitario boliviano, sobre todo los docentes que dictan cátedra y las condiciones en las que fueron contratados.