Cochabamba: Adiós a Felicidad Díaz, el rostro detrás del tradicional jueves de fideos uchu

Los restos de doña Feli son velados en el restaurante que se hizo famoso con sus deliciosos platos.


Fuente: Red Uno

Doña Felicidad Diaz Rojas, una cochabambina amante del arte culinario y que aportó al desarrollo gastronómico de Cochabamba durante 50 años, falleció este martes a los 83 años.



Su especialidad era el plato de fideos uchu, que era requerido por propios y extraños quienes abarrotaban su restaurante, principalmente los días jueves. Así nacieron los tradicionales y populares jueves de fideos uchu.

«Ella siempre tuvo una excelente mano en la cocina. Uno de los platos que creó ha sido el tradicional fideos uchu de los jueves servido en un ch’illami, con el que podía compartir la familia entera. Esa era su idea», contó su hija.

Todo se inició hace 50 años, cuando doña Feli vendía sus exquisitos platos en el mercado 25 de mayo. Luego, abrió su propio restaurante, que este año cumplió sus Bodas de Plata «engordando a los llajtamasis».

«Decía que siempre con trabajo, esfuerzo y mucha constancia se podían conseguir las cosas. Ella era una mujer muy generosa y querida por mucha gente. Nosotros estamos agradecidos por ello. Es una pérdida muy fuerte, pero ella seguirá viva en nosotros, en sus hijos», destacó emocionada la hija.

El legado queda en los seis hijos y 14 nietos de doña Feli, que aseguran que mantendrán su esencia en cada plato que hagan.

«Nos vamos a esforzar mucho por llevar su nombre y su legado en alto. Vamos a continuar trabajando en lo que ella quería, para ayudar, para dar trabajo a otras personas, es lo que ella siempre quiso», resaltó.

Sus restos son velados desde anoche en el mismo restaurante que la hizo conocida y querida por los cochabambinos, que hoy lamentan su partida.

«Para nosotros es un dolor muy grande, pero ella nos enseñó a ser fuertes hasta el último momento, así, nosotros sus hijos vamos a ser fuertes. La vamos a despedir de la forma que ella era, una mujer muy feliz, hacía honor a su nombre», agregó.

En los últimos meses, doña Felicidad batalló contra muchas enfermedades que la afectaron gravemente.

«Ella era una persona muy dinámica y el encierro por la pandemia le jugó en contra en su estado anímico. Además, las enfermedades de base que ella tenía. Fue muy fuerte porque hasta el último segundo de vida, ella ha luchado», complementó.