Gestión. El Sedepos beneficia a unos 180 menores de edad, de los cuales unos 50 pertenecen al mercado Alto San Pedro, situación que demuestra el gran impacto social del proyecto “Mercado amigo de la niñez y adolescencia”.
Fuente: Gobernacion de Santa Cruz
El reconocido conductor de televisión argentino Julián Weich, junto con el exponente del motociclismo de Bolivia Chavo Salvatierra, ambos embajadores internacionales de Unicef, engalanaron el acto de presentación del proyecto “Mercado amigo de la niñez y adolescencia””, organizado por la Gobernación cruceña, junto a la institución internacional y las asociaciones de los mercados Alto San Pedro y Santa Rosa, donde se mostraron las acciones en favor de los hijos de los comerciantes y de los vecinos de lugar.
Weich destacó que lleva 29 años como embajador de Unicef, pero en su país, al no existir estos tipos de centros de abastecimientos, no se implementan tipos de proyectos sociales a favor de la niñez. “Este tipo de trabajo es fundamental para que los niños, en lugar de estar trabajando como adultos, estén jugando y educándose”, argumentó.
Hizo referencia a que en el Alto San Pedro se cuenta con un espacio seguro y lúdico, por lo tanto espera que se este trabajo se replique en todo el departamento y el país.
Por su parte, Salvatierra expresó que esta es una de las tantas muestras del apoyo de Unicef en proyectos que benefician a los infantes en Bolivia, y el del Alto San Pedro representa un lugar seguro y educativo para que los hijos de los comerciantes aprendan, jueguen y pongan en uso su creatividad, en vez de trabajar como los adultos.
“Me llena de satisfacción este tipo de proyectos y de lugares donde se está dando un gran servicio a los papás que tienen sus niños en un lugar seguro (…), casi como una segunda escuela para los niños”, agregó.
Por su parte, la directora del Servicio de Políticas Sociales de la Gobernación (Sedepos), María José Miranda, explicó esta acción social se basa en cuidar, proteger y educar a los niños que los niños y adolescentes que acompañan a sus padres en los centros de abastecimiento estén libres de violencia, y que eviten estar en las calles o en los juegos electrónicos, así como tampoco realizando labores de adultos.
Por lo tanto, la Gobernación junto a Unicef lo que hace es ayudarlos en sus tareas escolares en turnos de la mañana y tarde para evitar el trabajo infantil, y a la vez se les provee de alimentos.
Y a pesar de que Unicef ya no brinda el mismo apoyo de antes, el Sedepos replica esta actividad beneficiando a unos 180 menores de edad, de los cuales unos 50 pertenecen al mercado Alto San Pedro, situación que demuestra el gran impacto social de los “mercados amigables con la niñez y adolescencia”.