«¡Fuerza Jeanine, estamos contigo!», fue el grito que lanzaron detrás de los muros del penal de Miraflores los diputados extranjeros Victoria Villarruel (coalición La Libertad Avanza, Argentina) y Víctor González Coello (partido VOX, España) quiénes llegaron a La Paz para visitar a la expresidenta constitucional transitoria Jeanine Añez y a otros los presos políticos, pero “órdenes superiores” impidieron cumplir con su misión.
Fuente: Prensa Creemos
La delegación arribó a La Paz muy temprano, junto a diputados de la Bancada de Creemos José Carlos Gutiérrez, Laura Rojas y Fernando Llapiz, a quienes no les importó las bajas temperaturas, pues ni bien aterrizaron se trasladaron juntos a la cárcel miraflorina, donde Añez está detenida desde marzo de 2021.
En puertas del penal, una veintena de mujeres con la tricolor y carteles con frases de apoyo a la expresidenta rezaron el padre nuestro. En medio de las oraciones llegaron los legisladores y fue Añez quien les dio la bienvenida, desde una ventana cubierta con un tejido de fierros, donde apenas se la podía ver.
Es Carolina Ribera quién, a nombre de su madre, les da un fuerte abrazo de bienvenida a los diputados extranjeros y a sus pares nacionales de Creemos. El jefe de Bancada de esta tienda política, diputado José Carlos Gutiérrez, lamentó la injusta sentencia contra Añez y que así lo advirtieran varios organismos internacionales, que develaron que la justicia en Bolivia está sometida al poder político.
«Lo confesó Evo Morales, que el juicio contra Añez fue una decisión política. Claro, Evo Morales es un lobo sediento de poder y por ello sigue amenazando al país», afirmó Gutiérrez.
Similar criterio, manifestaron los legisladores extranjeros, ambos integrantes del Foro de Madrid, quiénes pidieron libertad para los presos políticos bolivianos y una justicia imparcial.
Ya van cuatro organismos internacionales que observan la decisión judicial que condenó a 10 años de cárcel a la exmandataria por haber asumido ese cargo durante la crisis política de 2019, en medio de violentas protestas que precipitaron la renuncia y huida de mandatario Evo Morales.
«Hoy venimos a pedir y defender la libertad de Jeanine Añez, injustamente arrestada porque ha sido la garante de la defensa de la democracia ante un gobierno totalitario como el de Evo Morales, quien no tuvo la valentía de quedarse y prefirió salir huyendo», expresó González a los periodistas que se dieron cita afuera del penal.
Villarruel, con la voz casi entrecortada, reprochó la condena contra Añez por el caso Golpe II. «La expresidenta Añez, junto con militares y policías han sido recientemente condenados, con una condena que viola los derechos humanos, el Pacto de San José de Costa Rica, las leyes bolivianas. Esto nos preocupa», manifestó la diputada argentina ante los medios de comunicación.
Carolina aprovechó para leer la carta de agradecimiento que envío su madre a los diputados extranjeros. “Agradezco de corazón este hecho noble, reconforta mi alma saber que parlamentarios como ustedes se preocupan por las injusticias como la mía, que no solo me afectan a mi sino a mis hijos y a toda mi familia”, se lee.
La misiva agrega: “Hoy soy prisionera, estoy secuestrada por este gobierno que ha hecho del Ministerio Público y del Poder Judicial, un sicariato que a los presos políticos nos tienen en total indefensión. Mi cuerpo está preso pero mi pensamiento, mi conciencia es libre”.
Tras esas declaraciones, las autoridades tocaron las puertas del penal y los custodios policiales les exigieron sus credenciales. Pasó media hora y no hubo respuesta. Llegó las 11:15 y nada. En ese momento decidieron llamar a la directora del penal Estefanía Cervantes y esta afirmó que fue destituida del cargo y colgó la llamada.
Pero a los 10 minutos llegó una patrulla con al menos 10 efectivos policiales, algunos con uniforme camuflado y cargando sus armas largas, quiénes se apostaron en las puertas del penal. Tales uniformados sin distintivos intentaron que ni se toque la puerta, pero los legisladores insistieron repetidamente.
Tras una nueva y larga espera, los efectivos policiales indicaron finalmente que no había autorización para ingresar al penal, por lo que la delegación decidió trasladarle al penal de San Pedro, pero antes de ello hicieron lectura de un comunicado en el que denuncian la falta de garantías procesales en el juicio contra Añez y los militares condenados.
Villarruel dejó en claro que fueron tres motivos que impulsaron la condena judicial. El primero para ocultar el monumental fraude electoral que perpetró Evo Morales en 2019, el cual fue puesto en evidencia por un grupo de observadores y expertos de la Organización de Estado Americanos (OEA) y la Unión Europea.
El segundo, fue “para satisfacer la sed de venganza de Evo Morales quien reconoció públicamente el haber dirigido el poder judicial en contra de Jeanine Añez y, tercero, para escarmentar a todo aquel que se atreva a luchar en contra del Foro de Sao Paulo y del Grupo de Pueblo no solo en Bolivia sino el resto del continente”.
En ese sentido, el Foro de Madrid concluyó que “en Bolivia no hubo un golpe de Estado sino una transición constitucional, prueba de ello es que Añez asumió su mandato con los votos de parlamentarios del MAS que permanecieron en la Asamblea Legislativa y que no salieron del país ni se escondieron en las embajadas”.