Litiocracia

Las cartas van a cambiar de manos, los que siempre perdieron en el juego empiezan a ganar, Chile y Argentina quieren reunirse con Bolivia para gestionar la producción conjunta de Litio, pero por qué tanto interés de nuestros vecinos en este oro blanco, porque su precio se ha incrementado en más de 400% en el mercado internacional, debido a las consecuencias de la guerra en Ucrania.

Los países están dedicando recursos y esfuerzos considerables para encontrar sustitutos del petróleo, entonces ahí radica el interés de la explotación de este mineral de riqueza incalculable, peor todavía si se agudiza la crisis económica en estos países como Chile y Argentina que están desesperados por captar nuevos recursos para sus arcas totalmente malogradas por la inflación y la salida de los inversionistas extranjeros que ven en su modelo económico un peligro, pues están destruyendo todas las bases de su economía.



Argentina, Bolivia y Chile forman un cinturón del litio donde se encuentran las mayores reservas del mundo. Australia y China son los otros países quienes cuentan con reservas importantes. Zimbabue, Portugal y Brasil con gran producción en toneladas métricas. Afganistán con un último descubrimiento con reservas importantes. El oro blanco es la codicia de todo el mundo.

Los mercados son variados y van desde, EEUU, Unión Europea, Rusia y China, especialmente para la fabricación de (Dispositivos electrónicos portátiles, cámaras, marcapasos, teléfonos inteligentes, relojes y vehículos eléctricos a base de baterías de iones de litio). Es decir, todo el sector tecnológico.

Para el colmo, el gas boliviano no está siendo utilizado en la industrialización del país, sino que hace posible la industrialización de otros países como ser Argentina y Brasil. Bolivia queda privada del gas indispensable al desarrollo de su industria fundamental, si no que no dispone de las reservas probadas necesarias para hacer frente a los compromisos internacionales contraídos.

Dentro de una década, si no intensificamos la explotación de los recursos naturales, podemos quedarnos con el litio bajo el salar de Uyuni, departamento de Potosí. Esto no debe ocurrirle al país. Tenemos un tesoro enterrado rodeado de comunidades pobres. Nadie está en condiciones de calcular la amplitud de los daños, ni estimar las consecuencias desastrosas de la mala gestión de nuestros recursos naturales estratégicos, en particular con la gestión del litio.

El pueblo boliviano debe tener una idea cabal y concreta de las reservas de nuestros recursos naturales como el litio, aquí yo veo más apremiante realizar un plan de movilización psicosocial y una labor de concientización del litio.

Ahora vamos al análisis crudo y frío de esta situación: Bolivia durante la administración del expresidente Morales invirtió 700 millones de dólares en una tecnología de extracción que es obsoleta, la actual legislación prohíbe a empresas extranjeras la extracción del mineral, por eso primero sería necesario modificar la ley, ese es el objetivo de la actual administración del presidente Arce, quien seguramente sin el conocimiento de los bolivianos debe tener las negociaciones bien adelantadas, con empresas extranjeras y países vecinos interesados en la explotación del oro blanco, siendo Bolivia el mayor yacimiento de litio del mundo podría decidir el precio en los mercados internacionales.

Es decir, el MAS fracasó en la gestión estratégica de la producción del litio, (YLB) empresa encargada de la industrialización de este mineral, es otra empresa estatal deficitaria donde solo se pagan sueldos y salarios a personal no especializado, leales al partido. La gestión de Arce, demostró ser un mal administrador de nuestras reservas naturales. Este es el mayor desafío que nuestro país enfrenta durante toda su historia. (Industrialización del Litio), pero no solo es eso, la administración de Arce está dejando de lado a Uyuni, al departamento de Potosí, en la decisión de cómo encarar este desafío, sigue negociando con las empresas extranjeras sin consultar la opinión de los potosinos, se está equivocando de camino señor presidente.

Señor presidente los derechos de Bolivia sobre los recursos alojados en su territorio es un asunto interno de los bolivianos.

El monto de las reservas de litio no es información confidencial, los dueños del litio somos todos los bolivianos, y no quienes se aprestan a su despojo, no hagan negociados a espaldas del pueblo boliviano, no cometamos el error del Cerro Rico de Potosí, que solo sirvió para el desarrollo de otros países, dejando a nuestro país en la absoluta miseria, como hoy en día viven los comunarios de julaca y otras comunidades alrededor del Salar, sin fuentes de empleo, esperando que algún día llegue el desarrollo a sus tierras.

Cuidado que el litio boliviano, en el futuro, están haciendo posible la industrialización de otros países (China, Rusia), hasta la logística del litio está siendo analizada, es decir, se está desarrollando una verdadera máquina oscura de negociación política a espaldas del pueblo, ignoradas por el pueblo boliviano, de tanto repetir informaciones falsas, Arce y sus funcionarios han terminado por creerlas ciertas, creen en las falacias que ellos mismos maquinaron para desorientar al pueblo boliviano.

Cuidado el poder del litio o la litiocracia puede propiciar la guerra del litio, como ocurrió con la guerra del agua, o la defensa de la coca, o formar nuevos movimientos políticos en el futuro. ¡Uyuni, Potosí, Bolivia despierta…!

Jhonny Vargas es Politólogo