Ni hubo hasta ahora el anunciado «golpe de timón» ni tampoco la ratificación oficial de los secretarios y directores municipales, luego de que el jueves pasado Jhonny Fernández les pidiera a todos sus renuncias tras las secuelas de las críticas por su actuación y las denuncias de uso de bienes públicos como camionetas y oficinas por grupos de choque contra el paro por el censo.

Fuente: https://asuntoscentrales.com
Hasta ahora también están también vacantes los cargos de secretario de Autonomías y secretario de Desarrollo Humano. José Luis Santistevan dimitió el 28 de junio por sus diferencias con Fernández respecto al censo y aún no tiene sustituto, aunque se menciona como trascendido al exministro de Autonomías del Gobierno de Evo Morales, Hugo Siles. Adriana Pedrazas renunció el miércoles en la tarde, disconforme con decisiones del alcalde y por el uso inconsulto a su cartera del uso de camionetas de la Defensoría de la Niñez durante el paro.
Semanas atrás también había renunciado por discrepancias con el alcalde sobre el censo el abogado Héctor Montero Osinaga, asesor del presidente del Concejo Municipal, el ucesista Israel Alcócer. Pese a todo, Jhonny Fernández y el director general Juan Carlos Solares han negado una crisis de gabinete. El jueves pasado salieron a la luz pública también las cartas de renuncia de los secretarios de Cultura y de Transporte. De otros no se supo, aunque se supone que atendieron el pedido de Fernández de renuncia colectiva.
El viernes en la tarde hubo una reunión de emergencia del gabinete del Alcalde, que, se dijo, era para evaluar el desempeño de evaluar al entorno de Jhonny, sobre todo con el objetivo de que se vayan «los tibios», es decir los que no se comprometieron con el alcalde en su iniciativa de perforar el paro por el censo y con su desmarque de la comisión interinstitucional.
Fuentes allegadas al municipio comentaron a Asuntos Centrales que hubo un cambio de humor del alcalde desde la renuncia de José Luis Santistevan y desde que recibió las acusaciones de traición a Santa Cruz para apoyar al Gobierno del MAS, del que se dice es aliado, pero él lo niega.
También se comentó que dos días del paro de 48 horas de la semana pasada, hubo una instructiva desde la oficinas de bienes municipales para que los secretarios entreguen camionetas, pero algunos se sintieron incómodos porque no estaban enterados del uso que se le dio en los dos días de la protesta cruceña. Algunos de los funcionarios municipales temen enfrentar a la justicia por el mal uso.
Trascendió que el domingo antes del paro Jhonny Fernández tuvo un contacto con La Paz y volvió a su gabinete con la posición de apoyar el censo en 2023, ya sin las dudas que generó por su falta de firmeza para rechazar la postergación para 2024, lo que le ha ocasionado una avalancha de críticas de la institucionalidad cruceña y en las redes sociales. Sin embargo, su intento de volver atrás, ya tardía por los efectos de su indefinición, habría sido cuestionada por algunos de sus colaboradores. De hecho, Jhonny Fernández tuvo durante el paro una compañía reducida de su gabinete para enfrentar la crisis.
Otra fuente que estuvo cerca de Fernández antes dijo que es improbable que el alcalde haga grandes cambios en su gabinete, ya que no contaría con profesionales independientes que ahora quieran acompañarlo. Además, tiene relación directo con sus colaboradores considerados irremplazables como el secretario de finanzas, Mario Centellas, el de Seguridad Ciudadana, Ariel Lino, el de Administración Tributaria, Berman Hillman, la de Planificación María Andrea Daza, el de Equipamiento Social, Rubén Antelo. Sergio Luna, secretario de Obras Públicas, sería de confianza de Luciano Negrete, incondicional aliado de Fernández. Otra pieza cerca al alcalde sería Walter Reckling, director de Relaciones Internacionales, y Franz Cossio, de Alumbrado Público, además de la gerente de Emacruz, Andrea Hoyos. «Roberto Fernández tiene un equipo chico que trabaja desde su casa, con una conexión que es Jhonny Valdez», dijo una fuente que conoce la interna municipal. (foto de El Deber: última reunión de gabinete municipal)