Bolivia ocupa el penúltimo lugar de Sudamérica en índice de Desarrollo Humano

Bolivia se encuentra con un índice de 0,692, con lo que se ubica en el grupo de países con Desarrollo Humano Medio.
  • Ciudad de Cochabamba | Cortesía
Fuente: Los Tiempos / ANF

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) publicó la pasada jornada su informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022 donde sitúa a Bolivia en el puesto 118 de 191 países; a nivel Sudamérica, el país sólo está por encima de Venezuela.

El Índice de Desarrollo Humano (IDH) es un indicador creado por el PNUD que, desde hace tres décadas, da a conocer el grado de progreso de cada país evaluando variables como la esperanza de vida, la educación o el ingreso per cápita. El IDH calcula cada dimensión en variables de 0 y 1, de menor a mayor calificación. Se considera como Desarrollo humano muy alto los niveles superiores a 0,80; Desarrollo humano alto, cuyos niveles rondan entre 0,70 y 0,80; Desarrollo humano medio, entre 0,50 y 0,70; y Desarrollo humano bajo a valores inferiores a 0,55.

Bolivia se encuentra con un índice de 0,692, con lo que se ubica en el grupo de países con Desarrollo Humano Medio.



En Sudamérica, Chile encabeza el ranking en el puesto 42 de 191, le sigue Argentina (47), Uruguay (58), Perú (84), Brasil (87), Colombia (88), Ecuador (95), Paraguay (105), Bolivia (118) y Venezuela (120).

Según el documento, en la actualidad existe un retroceso generalizado en el 90% de los países a niveles previos al 2016. La pandemia, el cambio climático y la invasión de Rusia a Ucrania son algunos factores.

«Múltiples niveles de incertidumbre se acumulan e interactúan, desestabilizando nuestras vidas de maneras sin precedentes. No es la primera vez que la población se enfrenta a enfermedades, guerras y problemas ambientales. Sin embargo, la confluencia de presiones planetarias desestabilizadoras y desigualdades crecientes, unida a las profundas transformaciones sociales necesarias para aliviar esas presiones y la polarización generalizada, plantea al mundo y a todas las personas que habitan en él nuevas y complejas fuentes de incertidumbre que interactúan entre sí», afirma el administrador del PNUD, Achim Steiner, en el prólogo del informe.