Estudio muestra que la pobreza en Bolivia creció un 8% entre 2012 y 2022

El informe del Banco Mundial revela que en la región la pobreza moderada creció en todos los países. En el caso de Bolivia se ve un 8% de aumento. Sin embargo, el Gobierno maneja otras cifras en estos índices

Ivan Alejandro Paredes

 



Fuente: El Deber

El Banco Mundial puso en duda la meta de llegar a 2030 sin pobreza extrema. Esta instancia, mediante un estudio, asegura que en todos los países de la región la pobreza aumentó en los últimos diez años. En Bolivia, según este informe, la indigencia moderada creció en un 8% entre 2012 y 2022. El Gobierno maneja otros datos y asegura que la miseria se redujo en el país.

En un cuadro con datos del Banco Mundial se ve el mapa de Sudamérica con todos los países con registros de incremento de la pobreza en los últimos diez años. En el caso de Bolivia se expone que el país en 2012 tenía un 28% de población en pobreza moderada y que en 2022 asciende a 36%.

“Las tasas de pobreza y el índice de Gini reflejaron el comportamiento de la economía en 2021, regresando a reducciones en ambos, como se vio en el período previo a la pandemia. El aumento de la pobreza de 1,4 puntos porcentuales observado entre 2019 y 2020 (medido en $6,85 en PPA de 2017 líneas internacionales de pobreza) se compensó con una disminución de 1,8 puntos porcentuales entre 2020 y 2021, lo que resultó en un 15,2 % de las personas clasificado como pobre. Se observa un patrón similar utilizando la línea de pobreza nacional, que muestra que el 36,4 % o (4,3 millones de personas) viven en la pobreza en Bolivia”, dice parte del estudio del Banco Mundial.

Sin embargo, en un informe de la Unidad de Análisis de Políticas Sociales y Económicas (Udape), que depende del Ministerio de Planificación del Desarrollo, se demuestra que en 2012 la pobreza en Bolivia alcanzó al 43,4% y no al 28% como maneja el estudio. Según el Banco Mundial los datos recolectados para este documento son “oficiales”.

“El porcentaje de pobres que vive con un ingreso que no satisface los requerimientos de una Canasta Básica de Alimentos (CBA) y de los principales bienes y servicios no alimentarios se redujo de 64,8% en 1996 a 43,4% en 2012. Es decir que, en el año 2012, de cada 100 personas que viven en Bolivia se estima que 43 viven en condición de pobreza moderada”, dice parte del estudio de la Udape.

En la actualidad

En mayo de esta gestión, un estudio realizado por el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla) estableció que en promedio siete de cada diez hogares en Bolivia son pobres multidimensionalmente.
El Cedla señaló que la pobreza multidimensional no sólo se refiere a la pobreza monetaria relacionada con la insuficiencia de ingresos, sino que toma en cuenta el “acceso desigual de recursos, monetarios o no, servicios, protección social, acceso al poder y la voz o seguridad humana, entre otras dimensiones”.

El Banco Mundial define la pobreza extrema como las personas que viven con menos de 1,25 dólares al día. Son personas que no pueden cubrir sus necesidades básicas como alimento, agua potable, techo, sanidad, educación o acceso a la información.

En 2006 un 37,7% de la población boliviana se encontraba en situación de pobreza extrema, en 2019 se logró reducir esta cifra a 12,9%, mientras que en 2020 este dato subió a 13,7% y en 2021 bajó a 11,1%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Respecto a la pobreza moderada, en 2006 llegó al 59,9%, en 2019 se redujo a 37,2%; sin embargo, en 2020 subió a 39% y en 2021 se redujo a 36,3%, según datos del INE.
El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, destacó que en la gestión de Luis Arce se logró reducir la pobreza moderada y extrema a pesar de que en la gestión transitoria de Jeanine Áñez “se generó un retroceso económico y social”.

Sin embargo, el analista Enrique Velazco consideró que la “gran reducción” de la pobreza moderada y extrema que muestra el Instituto nacional de Estadística (INE) es “poco realista”, ya que no explora las múltiples dimensiones de la problemática ni sus causas.

“Los datos oficiales sobre la reducción de la pobreza no reflejan la compleja realidad que implica la pobreza en sus múltiples dimensiones”, afirmó Velazco.
El Banco Mundial afirma en su estudio que en Bolivia “se espera que la pobreza aumente ligeramente en 2022, ya que las medidas de mitigación para contrarrestar la crisis se han detenido en gran medida”.
La pobreza en América del Sur ha ido creciendo en los últimos diez años (2012-2022). En 2012 el bloque regional tenía un 21% de personas bajo la línea de pobreza. En 2022 ronda el 37%.

El informe del Banco Mundial muestra que los porcentajes del bloque no cambiaron mucho en la década; sin embargo, hubo una variación sustancial en la mayoría de los países en relación con los datos actuales. Punto de referencia del Banco Mundial para el nivel de pobreza de quienes viven con menos de 5,50 dólares al día.

En 2012, Colombia y Ecuador tenían los porcentajes más altos (32%), seguidos de Bolivia (28%), Brasil y Guyana, ambos con un 26%. Las tasas más bajas las tenían todavía Chile con 2%, Argentina 4%, Uruguay 6% y Paraguay 22%.

Reto difícil

Reducir la pobreza extrema antes de 2030 parece ser un camino poco probable para los países que se comprometieron a cumplir este Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) establecido en 2015, debido a que, en el resto de esta década, el crecimiento económico no muestra tasas inéditas en la historia, advirtió el Banco Mundial en su último estudio publicado el pasado 5 de octubre y titulado “La pobreza y la prosperidad compartida”.

“Los avances en la reducción de la pobreza extrema básicamente se han detenido, a lo que se suma un escaso crecimiento de la economía mundial”, afirma David Malpass, presidente del Banco Mundial en el documento.
El estudio vaticina que con la pandemia se empujó a unos 70 millones de personas a la pobreza extrema en 2020, el mayor aumento en un año desde que comenzó el seguimiento de esta cifra en 1990. En consecuencia, se calcula que 719 millones de personas subsistían con menos de 2,15 dólares al día a finales de la gestión 2020.

Fuente: El Deber