Encuestas vs la unidad deseada

“Encuesta: Hay un 40% del electorado que se resiste a votar por líderes del oficialismo y oposición” Es lo que dice la prensa respecto a una encuesta, donde nuevamente insertan nombres de líderes viejos, corruptos, desacreditados y los narcos vinculados del MAS que ya todos conocen. Las preguntas serían: ¿No existen nuevos líderes en Bolivia? ¿Por qué se insiste en colocar políticos rechazados en las encuestas que dicen realizar? ¿Se está volviendo a intentar generar tendencias para las elecciones del 2025? ¿Las encuestadoras conocen la realidad boliviana y los conflictos que se vienen dando? ¿Las encuestadoras solo conocen a los viejos líderes y de los nuevos no han escuchado hablar?

En los últimos 2 años hemos visto un aumento en el número de líderes políticos emergentes que están haciendo olas en el mundo de la política nacional. Algunos de ellos están trayendo nuevas ideas, frescas perspectivas y una energía renovada a la política, lo que está generando un gran entusiasmo entre los jóvenes votantes y esperanza en la vieja guardia de la población boliviana. Los hay Chapacos, Chukutas, Qhochalas, Cambas y Cocaleros. Destacando, que existen varias mujeres dignas, preparadas, valientes, admiradas y profesionales inteligentes que representan la Quinta Revolución Industrial (Por si no lo saben, es una nueva revolución tecnológica que pretende potenciar a la transformación del sector industrial en espacios inteligentes basados en Internet of Things y en computación cognitiva. Se trata de poner la inteligencia artificial al servicio de las personas, uniendo a máquinas y humanos)



Dentro de estos líderes políticos más destacados que hemos podido identificar están los que tienen más experiencia en política, que tienen una clara visión de su problemática y que se vienen destacando por sus intervenciones claras, críticas y oportunas a temas que el gobierno quiere imponer de una manera abusiva. Podemos citar a: Rodrigo Paz Pereira (55 años) y William Bascope Laruta (49) que tranquilamente pueden ser excelentes opciones para el 2025. También tenemos que destacar a los millennials que han decidido ser parte importante del quehacer político nacional y que demuestran valentía y coherencia en sus participaciones públicas, entre ellos tenemos a: José Carlos Gutiérrez (43); Henry Montero (44); Paul Coca (37); José Manuel Ormachea; Nadia Beller… A otros más jóvenes como: Fernando Llapiz; Khaline Moreno. Sin olvidarnos de Manfredo Bravo; Richard Ribera; Reiniero Vargas, entre muchos otros que los iremos mencionando más adelante.

Ahora bien, lo que tenemos que agradecer es que hubieran surgido líderes femeninas, tan valientes, cultas y políticas, que nos genera admiración cada vez que se pronuncian con vehemencia y coherencia. Son varias, pero la más destacada sin duda alguna es Jessica Paola Aguirre Melgar (36), quien tiene en su juventud a cuesta una trayectoria profesional digna de envidia de cualquier político. Seguramente en poco tiempo Laura Luisa Nayar Sosa (28) también será una líder destacada a nivel nacional, sin olvidarnos de Andrea Barrientos, Joven Senadora Cochabambina. Existen muchas mujeres que de a poco están adquiriendo compromisos con el país de una manera más responsable y desprendida.

Y cuando hablamos de profesionales empresarios, no podemos dejar de mencionar a los líderes de la CAINCO, de la CAO y de la FEPSC: Fernando Hurtado; Óscar Mario Justiniano y Jean Pierre Antelo. Quienes desde una nueva perspectiva de desarrollo productivo que incluye innovación y transferencia tecnológica, vienen impulsando una nueva forma de hacer empresa en Santa Cruz, intentando hacer entender al gobierno central, que lo que necesita el país es generar seguridad jurídica y credibilidad al empresariado para invertir en el territorio nacional, sin que genere déficit fiscal al Estado. Si no más bien, que aporte al crecimiento del PIB y genere mayor cantidad de empleos seguros para las familias bolivianas.

Estos jóvenes brillantes demuestran un conocimiento amplio de la política nacional, de las debilidades del liderazgo político, de la inseguridad existente en el país en todo sentido, de la mediocridad en la educación y de la falta de oportunidades a consecuencia de una alta politización ideológica y corrupta en el manejo del aparato estatal de parte del gobierno masista. Un ejemplo claro de cómo los jóvenes líderes pueden llegar a posiciones de poder y utilizar su plataforma para hacer una diferencia real.

Estamos viendo también a líderes jóvenes como Andrónico Rodríguez, Adriana Salvatierra, Eva Copa, Henry Cabrera y otros que representan a una nueva camada de liderazgo al interior del partido de gobierno, que han sido capacitados y demuestran altos conocimientos de política, encuadrados obviamente en un concepto ideológico socialista donde sobresale el uso indebido del poder político y de los bienes del Estado. También existen esos líderes, hombres y mujeres que entregan su vida en las calles defendiendo sus derechos ciudadanos y que arrastran a la gente a la protesta, entre ellos: Gary González junto a muchos jóvenes del Plan 3000, Oki Paniagua; Yassir Molina, etc.

Estos son solo algunos ejemplos de los muchos jóvenes líderes políticos que están emergiendo en nuestro país. A medida que la política sigue evolucionando, es importante que tengamos líderes jóvenes y diversos que puedan representar a las nuevas generaciones y sus necesidades y preocupaciones únicas. Los jóvenes líderes políticos son una señal alentadora de que el futuro de la política puede ser más inclusivo, progresista y equitativo. En un mundo que cambia rápidamente, es importante tener una nueva generación de líderes que estén preparados para enfrentar los desafíos del futuro, tienen el potencial de hacer una gran diferencia en sus comunidades y en el país en general.

La corrupción es un problema que nos viene afectando a los bolivianos gracias a la escuela masista y a la vieja práctica política de otrora partidos tradicionales. A menudo, los jóvenes líderes políticos son especialmente vulnerables a perder sus valores debido a la corrupción y esto es lo que se debe evitar, necesitamos cambiar de mentalidad, la política es para servir y no para servirse del poder.

Con todos estos antecedentes, señores encuestadores, no sería prudente que vayan cambiando su visión tramposa y angurrienta. Que es lo que no entienden del resultado que ustedes mismos han recibido respecto a que el 40 % de la población quiere nuevas opciones políticas y para nada los mismos nombres de siempre. Creo que es importante entender que la corrupción no solo implica actos ilegales, sino también acciones éticamente cuestionables que pueden ser legales. Por ejemplo, aceptar dádivas de políticos y partidos que buscan mantenerse en vigencia, sabemos que no puede ser ilegal, pero sí es inmoral y lo que están haciendo es socavar la integridad del boliviano.

Los líderes jóvenes políticos pueden estar particularmente en riesgo de perder sus valores debido a la presión de conformarse a las normas de su partido o grupo político. Además, pueden sentirse presionados por los intereses de los donantes o patrocinadores de campañas, lo que puede llevar a dañar sus valores en favor de los intereses económicos.

Como jóvenes líderes por el bien del país, tienen el poder de marcar la diferencia en nuestro país. Y si tanto hablamos de UNIDAD para cambiar el futuro, porque no mantienen sus valores y pasiones personales en el centro de su liderazgo, porque no se juntan para establecer desde ahora, antes del 2025, metas claras y puedan comunicar a toda la nación, que se quiere cambiar el liderazgo y combatir la corrupción en la política a partir de introducir nuevamente valores y principios.  Construyan relaciones sólidas, sean modelos a seguir y agentes de cambio y, sobre todo, cultiven la empatía. Con estos principios en mente, pueden liderar con éxito y hacer de BOLIVIA un lugar mejor.

Como verán, elementos y capacidad humana existen. Voluntad y desprendimiento de los viejos políticos como ser: Mesa; Quiroga; Doria Medina; Reyes Villa; Costas; Camacho y logias… no existe ni existirá. Para evitar perder sus valores, los líderes políticos jóvenes deben recordar constantemente los valores fundamentales y no así, que los llevados a la política tradicionalmente.

Deben ser conscientes de las presiones a las que están sujetos y estabilizarse firmes en sus principios éticos. También es importante rodearse de personas que compartan esos valores y que puedan brindar apoyo y asesoramiento. Estas personas, somos todos los ciudadanos que estamos podridos, que nos roben, que nos digan que no hay plata y que una malla curricular educativa que cambia la historia boliviana sea nuestra crítica realidad.

UNIDAD HONESTA es lo que se busca para combatir la unidad putrefacta que busca el MAS. UNIDAD alrededor de quienes entienden la problemática política y pueden convertirse en una opción verdadera de cambio. UNIDAD con quienes deben ser transparentes en su toma de decisiones y en su gestión de los recursos públicos. UNIDAD con quienes son transparentes para mantener la confianza del público para evitar ser acusado de una conducta poco ética. UNIDAD para fomentar la participación ciudadana en la toma de decisiones y la lucha contra la corrupción.

UNIDAD ES EL CAMINO PARA COMBATIR A LA MAFIA QUE NOS GOBIERNA

 

Alberto De Oliva Maya