Tras un mes de crisis, la alianza Súmate, del alcalde Manfred Reyes Villa, retomó ayer el control de la directiva del Concejo Municipal en una sesión que no contó con tres concejales del MAS ni con las legisladoras disidentes, Daniela Cabrera y Claudia Flores. Únicamente estuvo Joel Flores, que llegó escoltado, para garantizar el quorum.
Fuente: Los Tiempos
Cochabamba, Bolivia.-
La sesión convocada el jueves, 24 horas antes, por el concejal Manfred Reyes Villa, trató primero el recurso jerárquico que presentó la concejala Escarlen Terrazas, del MAS, que fue declarado “improcedente” por los cinco concejales de Súmate presentes en sala.
Después se eligió a la nueva directiva en lugar de la que se votó el 3 de mayo y que fue cuestionada por la bancada mayoritaria porque Cabrera y Flores ganaron con cuatro votos del MAS y desplazaron a Marilyn Rivera y Diego.
En la nueva votación, que se justificó con el fallo de la Sala Constitucional I y un error en la fecha de la convocatoria que hizo Rivera en mayo, ayer fueron elegidos Marcela Vidaurre (Súmate) como presidenta, Diego Murillo (Súmate) como secretario y Joel Flores (MAS) como vicepresidente.
El único concejal del MAS que acudió a la sesión presidió la sesión y Murillo dijo que Flores estaba obligado a acudir por el fallo de la Sala Constitucional. El mismo dice en su complementación que se debe aplicar el Reglamento del Legislativo, que prevé que el concejal más antiguo debe presidir la sesión.
Vidaurre defendió la legalidad de su elección, porque se cumplió con la resolución de la Sala Constitucional I, por lo que se enviará una copia.
Anunció que el lunes se regularizará la atención a la población en el Concejo. Añadió que convocará a una sesión para el martes y se notificará a las concejalas del MAS y al resto con el acta de la elección para coordinar el trabajo.