El Presupuesto General del Estado (PGE), es el instrumento de política económica y planificación, a través del cual se detallan el ingreso que percibirá el Estado boliviano y su manera de aplicación (gastos) para alcanzar los objetivos y satisfacer las necesidades de la población, como ser educación, salud, justicia, seguridad ciudadana entre otros.
Los ingresos están determinados por proyecciones econométricas, vale decir que empleando métodos técnicos científicos se proyectan las “posibles” cantidades y precios de las exportaciones del país, como ejemplo pondremos que para la próxima gestión se proyecta vender 2.000 barriles de petróleo a $us100 el barril, los ingresos proyectados del Estado serán de $us200.000.-
Así obtenemos nuestro presupuesto de ingresos; sin embargo, no debemos olvidar que para determinar el precio, históricamente se analizara el precio del barril en gestión anterior alcanzo cifras superiores a $us100, pero en la gestión 2020 y producto de la pandemia el barril llego a $us0, entonces se debe considerar situaciones “impensables” y sus posibles influencia en precios internacionales, de igual manera las cantidades a ser exportadas.
En este aspecto ningún gobierno puede establecer ingresos constantes o permanentes de ahí que la normativa vigente en nuestro país, establece porcentajes de distribución; así tenemos que en la Constitución Política del Estado se establece el 11% de regalías hidrocarburíferas, en nuestro ejemplo las gobernaciones se beneficiarían con $us22.000.-
Pero, si en la coyuntura internacional, llegaran los países productores a establecer un incremento en los niveles de producción o la guerra entre Rusia y Ucrania finaliza, obligaría a que el precio del barril de petróleo disminuya; para nuestro ejemplo, el país ya no vendería sus 2.000 barriles a $us100, sino a $us90, en este aspecto el Estado, el gobierno o algún ministro estaría incapacitado de influenciar sobre los precios internacionales.
En nuestro ejemplo el país ya no recibiría $us200.000.- sino $us180.000.-, por tanto, las gobernaciones se beneficiarían con $us19.800.-, esto de ninguna manera puede ser considerado como un incumplimiento o diminución del presupuesto, debido a que se está cumpliendo lo establecido en la norma legal que es la distribución del 11%.
También están los ingresos tributarios, vale decir aquellos ingresos que se generan a partir del pago de impuestos de toda actividad económica financiera en territorio nacional, de igual forma la proyección de lo recaudado se lo realiza a través de análisis econométrico y su distribución a universidades, municipios y TGN está en porcentajes establecidos por normativa, estos ingresos han tenido un comportamiento creciente de gestión a gestión, estos ingresos reflejan la estabilidad de la economía, ya que manteniendo el número de impuestos y su alícuota los ingresos se incrementan porque se crean e incrementa la actividad económica interna.
Los ingresos nacionales se ven afectados por condiciones, acciones y hechos internacionales, que no pueden ser controlados por el gobierno o por alguna autoridad, no pueden algunas entidades culpar al gobierno o acusarlo de causar la supuesta disminución del presupuesto, lo que deberían trabajar esas entidades y sus autoridades es generar sus ingresos propios, ya que la normativa actual permite la generación de sus recursos propios que vendrían a compensar los ingresos afectados por las condiciones internacionales.