El gobernador compartió este momento familiar a través de las redes sociales
Fuente: El Deber
«¡Muchas felicidades mi amor! ¡Profesional con honores!», inicia diciendo el gobernador, Luis Fernando Camacho, a su hija María Fernanda, tras salir exitosa de la defensa de su tesis universitaria. El post está acompañado de emotivas imágenes, de ella y su familia.
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«Mi princesa, hoy diste un paso más en tu vida: rendir con éxito tu tesis en una profesión que amas; es algo muy especial, una profesión abocada al servicio a la gente, de ayuda, de amor, de solidaridad, como no podría haber sido distinto conociendo tu alma y tu corazón noble y lleno de bondad», continúa el texto dedicado a la joven, de 26 años, la mayor de sus tres hijos que se casó el año pasado.
El gobernador no puede evitar lamentar si situación, desde Chonchocoro, por lo que le indica que «no pude acompañarte en este día importante de tu vida, pero mi corazón, mi alma y mis oraciones estuvieron, están y estarán siempre a tu lado. Tu felicidad es y será siempre mi felicidad… y estoy muy orgulloso por este importante éxito de tu vida».
Asimismo, en su espacio más nostálgico, le recuerda que para él siempre ha sido, es y será la luz de sus ojos.
«No te voy a negar que a la vez que me embarga la felicidad, esta viene acompañada de nostalgia, por ver cómo pasa el tiempo y cómo mi princesa, la luz de mis ojos, de estar en mis brazos, totalmente frágil y dependiente de mí en todo momento, ahora ya es una mujer; ya tiene una familia propia y ahora es una profesional», reza el documento expuesto.
Agrega que «más temprano, cuando empecé a escribirte esta carta, miles de momentos que pasamos juntos se me vinieron a la mente… los recordé todos con alegría en mi corazón, es que marcaste mi vida de tantas maneras; solo con nacer, me hiciste madurar, al verte por primera vez comprendí lo que es el amor incondicional y al tener que irme dos años a España a terminar mis estudios y alejarme de vos, supe lo que es el sacrificio y aprendí a valorar y a atesorar en mi corazón cada minuto que pasamos juntos».
Y concluye reiterando sus palabras de felicitaciones. «Felicidades mi amor, disfruta este nuevo logro, mi pecho brota de orgullo, te amo con la vida. ¡Dios te bendiga y guie siempre tus pasos!».
Si bien en el acto de la defensa de tesis no pudo estar su padre, según las fotografías publicadas se pudo evidenciar que estuvo el resto de su familia, entre ellos, su abuelo, José Luis Camacho, con quien se da un abrazo cargado de sentimiento, que estalla en lágrimas.
Fuente: El Deber