El 8 de marzo de 1997, el país resultó consternado por la muerte del “compadre” Carlos Palenque Avilés, conocido músico, comunicador y líder de Conciencia de Patria (Condepa).

Fue Adolfo Paco, su ahijado y compañero en Radio Televisión Popular (RTP) junto a Remedios Loza (+), quien difundió la información.

Ahora, empresario y propietario del hotel La Mansión de Caranavi, en el norte de La Paz, contó detalles de los últimos días de Palenque en una entrevista con Claudia Benavente en Piedra, Papel y Tinta, de La Razón.

El compadre falleció a punto de cumplir 53 años en medio de una crisis matrimonial con su entonces esposa Mónica Medina.

“¿Alguna vez ustedes han amado? Yo no tengo ningún comentario que hacerles. No me hablen de ella, por favor. No lo hagan, porque hiere mis sentimientos más profundos”, había sido la respuesta de Palenque ante la inquietud de los periodistas en días precedentes al desenlace.

Aquí un extracto del relato de Adolfo Paco:

“No sé si al día siguiente mismo, no puedo precisar, entro a su oficina. ‘Jefe, buen día’, le digo. Estaba llorando el compadre:

—Jefe, estás mal

—Sí, estoy mal. Qué vamos a hacer, pues, son cosas de la vida

—Pero, ¿por qué no hablas con ella? Me ha llamado

—¿Te ha llamado?

—Sí. ¿Por qué no hablas con ella? Escúchala. Todos cometemos errores en la vida; nos ha pasado, jefe. Trataremos de ver eso, es tu felicidad, ¡qué te importa el mundo! Qué te importa todo, que ella vuelva. No sé, tú tienes que decidir, es tu vida, no la vida de los demás.

—¿Qué va a decir la gente?

—¡Qué les importa!

—Ya, Adolfo, esta tarde hablaremos

Brillaron sus ojos, se tranquilizó. Y salgo, estaban dos personas ahí, no quiero mencionarlas. Entraron los dos, eran gravitantes; uno del entorno y el otro, pariente.

Entonces, no sé quién, pero le hizo cambiar de opinión. Porque cuando vino a la Tribuna (Libre) ese mismo día, empezó a maltratarme.

Me dijo ‘¡cómo es posible eso, que no busques, mira, esta sucio!’. Cinco pies al gato, ¿qué pasaría?

Ya a la hora que habíamos previsto hablar, yo le llamo:

—Jefe, ¿cómo es?

—¡No me molestes, estoy ocupado! ¡Olvídate, congela eso!

Y pasaron tres o cuatro días, sábado 7 de marzo. En la mañana yo me reuní con él; almorzamos y ya eran las dos de la tarde. Quería quedarse conmigo, le dije ‘tengo que ir a hacer Sábados Populares, jefe’.

Volviendo al pasado, la entrevista de La Razón con Mónica Medina

Tenían que bajar sus hijos, no bajaron, y me tuve que ir al programa. Y tipo siete de la noche o seis y media, me llama una de las personas y me dice ‘el compadre está mal, anda’. Yo le mando a uno de mis coordinadores. ¿Qué ha pasado? Estaba en pleno programa; tenía un programa, Súper Estelar.

Cuando de pronto me llama, (me dice) ‘baja nomás’. Y en pleno camino, me dice la noticia; yo casi me estrello con otro vehículo.

Llego directamente a la clínica, y los médicos, que son tan fríos, me dicen ‘ha muerto ya’.

Era terrible. No sé cómo lo llevamos a su casa y ahí los medios se enteraron de la información que les di. Y se creó un conflicto social fuerte y emotivo para toda la población

Yo te voy a contar algo que me contaron. Había un matrimonio, donde hacía la fila para el buffet. Cuando alguien cuenta la noticia, se suspende el patrimonio. Ese tipo de situaciones ha causado la muerte del compadre Palenque”.

«Fue demasiado para mí». Paco se quiebra, toma un vaso de agua y lamenta la muerte del compadre. «Yo pensé que iba a morir a lado de Carlos Palenque, lo veía presidente», cuenta.

Dice que el otrora líder de Condepa tenía una filosofía y principios esenciales, y una proyección interesante, «pero el entorno que lo rodeaba le hizo fallar». Ese entorno.