Ronald Palacios Castrillo
El mensaje ( ver abajo) de la Dra. Marcia Angell es tremendamente revelador de las presiones (sobretodo entre 2019-2023) que han hecho de la mejor revista de medicina del mundo, el New England J. Med, una fuente de información o desinformación médica ya nada creíble ni confiable. Una tristeza y verdadera tragedia en la información médica mundial.
Esta noticia me la enviaron a Linkedln y este fué mi comentario (traducido del inglés, idioma en que originalmente lo escribí) para Linkedln:
Sólo puedo imaginar la enorme presión que las grandes compañías farmacéuticas, las agencias gubernamentales de salud (OMS, Fauci y NIH) y otros grupos con intereses nefastos (Gates, Schwab/WEF) estaban ejerciendo sobre la Dra. Marcia Angell para:
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1) Bloquear las publicaciones en la revista que describen tratamientos efectivos con muy buenos resultados; en base a medicamentos bien conocidos y seguros que resultaron muy efectivos para tratar el Covid.
2) Publicar trabajos que afirmen la eficacia y seguridad de las vacunas contra Covid basadas en ModRNA.
3) Rechazar publicación de trabajos que describen el creciente número y frecuencia de efectos secundarios graves y muertes causadas por las vacunas ModRNA.
4) Acelerar la publicación de artículos que describen los “maravillosos” medicamentos Moulnoparivir, Paxlovid y Remdesivir para el tratamiento de Covid a pesar de la evidencia independiente de ensayos que muestran beneficios menores o nulos y toxicidad.
5) Estar en la primera línea donde la ciencia médica, que generalmente ha sido anteriormente muy respetada por los editores de NEJM durante tantos años, quedó sujeta a la influencia y el dictado político y económico de las compañías farmacéuticas, las instituciones de salud (ver arriba) y actores siniestros y nefastos.
La Dra. Marcia Angell tiene toda mi admiración y respeto (creo que también el de muchos otros científicos y médicos) por su valentía al hacer público por escrito sus experiencias frustrantes y decepcionantes durante su trabajo como Editora en Jefe del New England Journal of Medicine.
¡Bravo Dra. Angell y gracias!