La soberana de la ‘fiesta grande’ hizo su paso por el palco oficial recién a las 2:30
Fuente: eldeber.com.bo
Suman las quejas a la organización del Corso 2024 y el retraso de las comparsas. El público tuvo que aguardar más de lo esperado para ver a la soberana de la ‘fiesta grande’, Aitana Tufiño, cuyo carro recién se movió pasada medianoche y pasó por el palco oficial a las 2:30.
Si bien la alegría y simpatía de la reina compensó la larga espera, integrantes de algunas agrupaciones tradicionales se quejaron porque también debieron soportar largas horas en la fila, esperando su turno para su presentación. Entre ellas están las comparsas femeninas, que se esmeran con sus carros, tocados y trajes y brindan un gran espectáculo.
María Ugarte, presidenta de la Comparsa Femenina Kuña Porá hizo pública su molestia. “Lo que vivimos las mujeres anoche fue vergonzoso y abusivo en un Corso totalmente desorganizado (…) Me pareció un abuso y un exabrupto que las comparsas de damas salgan con el número 53, con bellas alegorías listas para mostrar al público”, señaló.
Considera que mínimamente, al momento de inscribir a las comparsas, el primer requisito debe ser tener reina y alegoría.
Integrantes de otras agrupaciones indicaron que no se consideró la gran cantidad de comparsas que se inscribieron este año para participar del corso (más de 250), entre ellas las coreográficas, lo que retrasó el paso de las agrupaciones tradicionales y de la soberana. Creen que se debió adelantar el inicio del Corso para que la soberana pueda salir a las 21:30, como estaba programado.
A ello se suma las observaciones por el desorden que facilitó que otras comparsas no respeten el orden y se colen en el recorrido en puestos más adelante, perjudicando a las comparsas con carros.