Plan Tres Mil cumple 41 años y los primeros vivientes recuerdan con nostalgia el turbión de 1983

El mes aniversario de la populosa ciudadela Andrés Ibáñez inició este viernes 1, con la iza de la Bandera Cruceña en la Plaza El Mechero.

41 años de la ciudadela Andrés Ibáñez del Plan Tres Mil. FOTO: Dron Walter Chama.
Fuente: Red Uno

Este lunes 18 de marzo se conmemoran 41 años desde la fundación de la ciudadela Andrés Ibáñez en el Plan Tres Mil de Santa Cruz, marcando un hito en la historia de esta zona que surgió como respuesta a una tragedia natural. El mes aniversario la populosa zona inició este viernes 1, con la iza de la Bandera Cruceña en la Plaza El Mechero.



 

Fue en 1983 cuando un turbión de gran magnitud del río Piraí azotó la región, dejando a más de 3.000 familias sin hogar. En medio de la desesperación y con pocas posesiones a cuestas, estas familias encontraron refugio en terrenos baldíos de propiedad privada en la zona sudeste de la ciudad, dando origen a lo que hoy es conocido como el Plan Tres Mil.

Desde entonces, este barrio ha sido testigo de un crecimiento poblacional significativo, principalmente debido a la migración interna proveniente de diversas regiones del país. Actualmente, la ciudadela alberga a más de 350.000 habitantes, convirtiéndose en uno de los sectores con mayor densidad demográfica en Santa Cruz.

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Los recuerdos de aquellos días difíciles aún están frescos en la memoria de quienes vivieron la tragedia. Virginia Justiniano, vivientes del Plan Tres Mil desde su fundación, contó cómo el turbión amenazó con llevarse todo a su paso. “Recuerdo que me decían ‘doña Virginia, venga con sus hijos’, y nos pasamos al otro lado de una loma. Mis hijos iban agarrados de mi cintura y el otro que iba en mis brazos. Muy triste, no quiero acordarme de esos momentos porque yo me quedé sin nada”, relata con lágrimas en los ojos.

La señora Victoria, ahora con 77 años, fue una de las primeras en abandonar la zona antes de que el turbión llegara en febrero de 1983. “Recuerdo el turbión con gran tristeza porque perdí un terreno bastante grande y perdimos todo, quedamos sin nuestras casas”, añade con la voz entrecortada.