Ellos también son parte de nuestra bullanguera ciudad: animales e insectos urbanos, no les tengás miedo, más bien cuidalos

Santa Cruz: Disfrutá estas bellísimas postales dignas de colección y de paso, enterate de las curiosidades y particularidades del guajojó, tiluchi, perezoso, chupacoto, cucos y caracoles
El guajojó, un ave que tuvo mala fama sin merecerla. Gatos y perros son su peor amenaza
El guajojó, un ave que tuvo mala fama sin merecerla. Gatos y perros son su peor amenaza

 

Fuente: El Deber

¿Le pasó que durante un paseo a pie se tropezó con un simpático perezoso, un caracol, o un guajojó mientras trotaba por la noche? La urbe cruceña tiene mucho verde, pero también una gran cantidad de animales e insectos silvestres.



No es necesario alejarse mucho de las losetas y el concreto para avistar tiluchis, cucos y ‘chupacotos’. Aquí reunimos una colección de fantásticas fotografías logradas por nuestros fotoperiodistas y les agregamos los conocimientos de los capos en el tema de la biología cruceña. ¿Los querés conocer mejor?

Los biólogos Eliamne Gutiérrez y Rómer Miserendino, además de la página en las redes sociales de Copernicia, biología urbana, coinciden en que estos forman parte del ecosistema citadino cruceño y que son totalmente inofensivos, alentando a cuidarlos siempre.

«Son parte fundamental de los ecosistemas urbanos, en los cuales se desarrollan procesos naturales complejos y delicados, donde los ciudadanos también formamos parte» hace notar Gutiérrez y recomienda no asustarse ni alarmarse si se los encuentra en el jardín, el parque u otra parte.

«Desde murciélagos, carachupas, perezosos, serpientes, aves y muchos insectos, son habitantes de nuestra hermosa y bullanguera ciudad, sobreviviendo y luchando por adaptarse a nuestro acelerado ritmo de vida«, subraya.

Guajojó injustamente acusado de malagüero

El guajojó, un ave que tuvo mala fama sin merecerla. Gatos y perros son su peor amenaza
El guajojó, un ave que tuvo mala fama sin merecerla. Gatos y perros son su peor amenaza

 

Aunque no es un ave muy bella ni colorida, el guajojó es parte del paisaje cruceño, sin necesidad de salir hasta el campo. Es común verla en nuestra ciudad. Sus ojos grandes suelen estar bien abiertos por las noches y por el sonido que emite, y su pinta un tanto lúgubre, se la acusó de ser un ave malagüera.

Es miembro de la familia Nictybiidae, tiene un tamaño aproximado de 30 cm, su plumaje es de tono gris y cuando se posa sobre una rama o un palo, bien puede quedar mimetizada.

Es capaz de quedarse completamente quieta, lo que facilita su camuflaje. Su reproducción es lenta, ponen un solo huevo, cuidándolo tanto el macho como la hembra.

Se alimentan de insectos que atrapan con ese pico de enorme apertura, lo cual puede ser algo intimidante, pero son animales realmente inofensivos.

La bióloga Eliamne Gutiérrez explica que es muy frecuente encontrarse ejemplares desorientados o que se han golpeado contra alguna estructura, desde los meses de febrero en adelante, cuando los cambios de temperatura o surazos, los obligan a moverse. Aclara que «no son de mala suerte» y «tampoco tienen ninguna relación con la muerte». Son aves muy delicadas, por lo que los gatos, perros y vidrios reflectantes suelen ser sus peores enemigos en la ciudad.

Perezosos, son tan cruceños como vos

Su alimentación se basa en hojas tiernas por lo que su caca aporta nutrientes al suelo
Su alimentación se basa en hojas tiernas por lo que su caca aporta nutrientes al suelo

 

Se encuentran activos tanto de día como de noche. Son arbóreos (viven en los árboles) y andan solitarios, exceptuando las épocas de apareamiento. 

Dan a luz a una cría y su gestación dura 6 meses. Luego, al mes de nacidos, las crías son destetadas para luego ser abandonada por la madre a los seis meses de edad, que es cuando comienzan a vivir por sí solos.

Son territoriales, por lo que raramente se encontrará a más de un perezoso compartiendo el mismo árbol. En la ciudad de Santa Cruz de la Sierra son bastante frecuentes los encuentros con esta especie, ya que forman parte de la fauna urbana, alimentándose de los frutos del ambaibo o de las hojas de los toborochis, entre otros.

En el mundo hay 6 especies de perezosos y Bolivia cuenta con dos: Bradypus variegatus o perezoso de tres dedos y Choloepus hoffmanni o perezoso de dos dedos de Hoffan.

Su alimentación se basa en hojas tiernas y retoños, por lo que su caca aporta importantes nutrientes al suelo de las selvas tropicales.

En nuestra ciudad es muy común verlos, por ello es importante que no te asustés por su presencia, más al contrario, cuidá de ellos, son parte de nuestra fauna urbana y son tan cruceños como vos. Y ni se te ocurra molestarlos o intentar apurar su paso lento.

Los niños dañinos pueden intentar interactuar con ellos, es más, décadas atrás se decía que si se le mostraba un cuchillo o puñal se ponían a lagrimear. Lo cierto es que lo mejor es no molestarlos y dejarlos ser.

Chupacoto pone a raya al mosquito ‘denguero’

Es tremendamente útil porque pone a raya a muchos insectos, especialmente a los mosquitos
Es tremendamente útil porque pone a raya a muchos insectos, especialmente a los mosquitos

 

Su nombre es Hemidactylus. Este es todo un personaje en Santa Cruz, frecuenta las casas y es totalmente inofensivo.

Es africano y científicamente se dice que es un alóctono: es decir, que está en un lugar en el cual no es originario, pero se ha adaptado muy bien a la zona donde está actualmente, como si fuera su lugar de origen. En otras palabras, en Santa Cruz están a sus anchas.

¿Cómo llegó desde tan lejos?  Una hipótesis de su llegada al continente la asocia con el comercio de esclavos o que llegó a través de balsas flotantes de origen natural desde África. En todo caso, su dispersión está asociada a migraciones humanas. Si bien son inofensivos para el ser humano y de hecho hasta beneficiosos, como toda especie invasiva y territorial, puede llegar a desplazar a otras especies nativas.

Es tremendamente útil porque pone a raya a muchos insectos, especialmente a los mosquitos portadores del dengue que abundan en nuestro departamento.

Cuco cantor para enamorar a la hembra

La frecuencia de la vibración o canto que emite un cuco puede llegar a los 86 hertz
La frecuencia de la vibración o canto que emite un cuco puede llegar a los 86 hertz

 

Es un insecto cuyo zumbido es típico escuchar en los atardeceres cruceños en primavera y en verano. ¿Qué niño no ha jugado a atrapar a alguno?

Conocido también como chicharra, cigarra, cocora, cocorrín o cogollo, los cucos responden al nombre científico de los cicádidos (Cicadidae), son una familia de insectos del orden hemiptera.

La frecuencia de la vibración o canto que emite un cuco puede llegar a los 86 hertz. ¿De dónde viene su potente y ruidoso canto? De su órgano estridulatorio, ubicado a los costados del abdomen donde tiene membranas y sacos con aire que hacen las veces de cajas de resonancia y ¿todo esto para qué? Para el apareamientoNecesitan llamar la atención de la hembra, y cantan para lograr su fin.

Tiluchi, todo un constructor que no rehúye la presencia del hombre

Los tiluchis prefieren construir en infraestructuras humanas como postes de luz
Los tiluchis prefieren construir en infraestructuras humanas como postes de luz

 

Esta especie es endémica de Sudamérica meridional, y considerada el ave nacional en Argentina. Su dependencia de la disponibilidad de barro hace que rehúya las zonas más áridas, y su relación con el hombre quizá influye en que su distribución avance simultáneamente con la expansión de la instalación humana permanente y sus sistemas de riego o provisión de agua.

Es un ave sedentaria (no migra), tolerante a la presencia humana y el bullicio de las urbes. Durante la época de nidificación, las glándulas salivales de los horneros se hipertrofian y aumenta su secreción para así mojar los materiales de construcción y darles mayor cohesión.

En Santa Cruz de la Sierra se han observado construcciones de horneros de hasta 6 hornos uno encima de otros, y suelen preferir construirlos en infraestructuras humanas, postes de alumbrado público o las farolas del parque urbano.

Caracoles, no son tan tiernos como lo creés

Si los ves 'chiquitingos' en los cultivos o las plantas, que no te engañen, crecen mucho
Si los ves ‘chiquitingos’ en los cultivos o las plantas, que no te engañen, crecen mucho/Foto: Jorge Ibáñez

 

Después de que llueve, los caracoles siempre asoman en el jardín. Los niños acostumbran jugar con ellos e incluso molestarlos, pero no es buena idea.

Son de origen africano. Lissachatina fulica es una especie de caracol terrestre de la familia Achatinidae, en el orden Stylommatophora, comúnmente conocida como caracol gigante africano.

Si los ves ‘chiquitingos’ en el pasto, los cultivos o las plantas, que no te engañen, crecen. Se alimentan de distintas plantas, llegando incluso a convertirse en plagas de importancia económica.

A diferencia de los otros seres vivos que hemos descrito, es mejor no manipular estos porque son portadores de angiostrongylus cantonensis: que causa meningoencefalitis eosinofílica en humanos.

Fuente: El Deber