En España eligen como rector de la Universidad de Salamanca a catedrático cuyo informe sepultó el caso fraude

El texto del catedrático desató un terremoto político en Bolivia y fue utilizado para acusar a Edgar Villegas, que destapó el fraude. Las elecciones de 2019 en el país fueron anuladas por la OEA.

El catedrático Juan Manuel Corchado deposita su voto este martes en las elecciones a rector de la Universidad de Salamanca. Foto: Europa Press / El País
El catedrático Juan Manuel Corchado deposita su voto este martes en las elecciones a rector de la Universidad de Salamanca. Foto: Europa Press / El País

Fuente: Visión 360

 



 

El profesor universitario español Juan Manuel Corchado, cuyo informe concluyó que no hubo fraude en las elecciones anuladas de 2019 en Bolivia, ganó las elecciones para la rectoría de la Universidad de Salamanca, en medio de acusaciones en su contra por hacer trampas para «inflar» sus logros profesionales y destacar su perfil por sobre el de otgros académicos.

El diario español El País publicó recientemente una nota, con pruebas, de cómo este catedrático “infló” su impacto científico con trampas durante años, añadiendo miles de autocitas irrelevantes en sus publicaciones, y beneficiándose de multitud de perfiles fraudulentos de investigadores inventados dedicados a mencionar compulsivamente sus artículos.

Este miércoles, el mismo diario publicó una nota en la que da cuenta de que Corchado, especializado en inteligencia artificial y ciberseguridad, obtuvo 2.131 votos a favor de su candidatura, apenas un 6,5% de los 33.000 universitarios que estaban convocados a votar este martes.

Según ese medio español, “miembros de la Universidad de Salamanca habían hecho un llamamiento a votar en blanco en señal de protesta. La mitad del profesorado que ha ido a votar no ha votado por el único candidato que había. En el total de las elecciones, el 35% de los votos válidos han sido en blanco”.

En 2019, este profesor español fue contratado por la Fiscalía General del Estado para emitir un informe sobre las elecciones de 2019, que fueron anuladas por la Organización de Estados Americanos (OEA) y que desembocaron en la renuncia de Evo Morales a la presidencia y su posterior huida a México.

El informe de Corchado fue utilizado por el fiscal general, Juan Lanchipa, para procesar al ingeniero informático Édgar Villegas, quien en 2019, junto a un equipo de expertos, demostró que se alteraron las actas de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) de los comicios de octubre de ese año.

Las repercusiones de ese informe incluso sacudieron la política interna de España, cuando diputados del Partido Popular pidieron explicaciones al ejecutivo de Pedro Sánchez sobre el texto, elaborado por el grupo de investigación Deep Tech Lab de Bisite, que dirigía Corchado.

Según la organización Retraction Watch, especializada en investigar fraudes científicos, Corchado “utilizó diversos trucos para aumentar su visibilidad en internet, incluyendo la creación de documentos con perfiles falsos que lo citan repetidamente para posicionarse como el autor más citado por encima de otros investigadores”.

“Las trampas de Corchado eran muy burdas. Hacía resúmenes de sus conferencias, añadía una cantidad hiperbólica de autocitas y los subía al repositorio científico de su universidad. El catedrático sabía que el motor de búsqueda de Google Académico detectaba esos documentos y los tenía en cuenta para elaborar sus indicadores, según los cuales Corchado es uno de los expertos en inteligencia artificial más citados del mundo”, reseña el reportaje de El País.

El genetista Lluís Montoliu, expresidente del Comité de Ética del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), citado por El País, dijo que “todos los que nos dedicamos a la ciencia, y especialmente los que lo hacemos desde instituciones públicas, debemos comportarnos de acuerdo a los códigos de buenas prácticas de nuestra institución, que actúa como referente para todos. Comportamientos inadecuados como los conocidos vulnerarían la integridad científica y no son admisibles”.

El matemático Antonio Bahamonde, expresidente de la Asociación Española para la Inteligencia Artificial, también lamentó la victoria de Corchado. “La universidad debe perseguir la excelencia y noticias como estas no redundan en la excelencia. La autoestima en la comunidad universitaria va a quedar muy mermada”, apuntó Bahamonde, catedrático de la Universidad de Oviedo y también expresidente de la Sociedad Científica Informática de España.

Corchado, de 52 años, asumirá en las próximas semanas las riendas de la Universidad de Salamanca (su ciudad natal), con casi 290 millones de euros de presupuesto anual, en un mandato que se extenderá hasta 2030.

El académico celebró su victoria en una comparecencia en Salamanca, en la que sugirió “la existencia de un enemigo oculto”.

“Estamos especialmente contentos con los resultados que hemos obtenido. Hemos recibido muchísimo apoyo del profesorado. Era muy difícil competir en este momento, cuando se compite contra una candidatura que no existe (…) y sobre unas caras que no las dan, que están ahí, pero que realmente han estado escondidas”, dijo Corchado y cerró con: “que nuestros campus sean la envidia de toda España y del resto del universo”.