El analista urbano Rolando Schrupp se refirió al problema de aseo que tiene movilizados a los trabajadores que desde este lunes cumplen un paro de 72 horas en la capital cruceña
[/Foto: UNITEL] / Imagen del analista urbano Rolando Schrupp
Fuente: Unitel
Desde las 00:00 de este lunes, los trabajadores de aseo urbano ingresaron en un paro de 72 horas, en el municipio de Santa Cruz de la Sierra, para exigir a la empresa Piraí el pago de sueldos adeudados, regulación de horarios y mejores condiciones laborales.
Para el analista urbano Rolando Schrupp, se observa un problema de fondo que tiene que ver con la gestión administrativa. Señaló que se entiende que la cadena de pago coloca la cancelación del usuario a través de la factura de luz en donde está estipulado el pago del servicio de aseo a la Alcaldía que paga a la empresa y a su vez, esta a sus trabajadores.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
“Entonces, si los trabajadores no están recibiendo el pago, hay dos opciones, o la empresa no les está pagando o no se le está pagando a la empresa, porque nosotros estamos pagando la tasa de aseo urbano todos los meses. Por lo que yo entiendo, no ha sido suspendido el cobro en la factura”, expuso en entrevista con La Revista de UNITEL.
Este es un conflicto que pone sobre la mesa un “problema de fondo muy preocupante, que es la gestión administrativa de la Alcaldía”, porque “no solamente encontramos falta de pago en este caso, que es una partida especial, que si la están usando para otra cosa tiene consecuencias por una malversación de fondo, sino que se repite con las constructoras, con los mismos trabajadores municipales, entonces ya es un tema que da una señal de una iliquidez en la Alcaldía”.
“Si está ilíquida la Alcaldía, quiere decir que está quebrada o que está en vías de quebrarse. Entonces eso es lo que debería preocuparnos a todos, no solamente el problema, sino la causa y la raíz estructural del problema”, apuntó.
Por su parte, Bernardo Montenegro, director de Asuntos Jurídicos de la Alcaldía cruceña, señaló en días pasados que se hicieron grandes esfuerzos por llevar una mesa de diálogo entre las partes involucradas, pero que sin embargo, “por solo uno de los puntos, de los 30 que se analizó, se ha roto el diálogo, se perjudicó a los trabajadores de la institución”.
Señaló que si las movilizaciones dejan un efecto directo en el servicio se demandará a quienes resultaren responsables del perjuicio que se le genere a la población.
Deudas
Al problema de aseso urbano, se suma también la deuda millonaria que tiene el municipio cruceño a empresas constructoras a los que “se le debe muchísima plata a todos los que le prestan servicio, sea de construcción, de bienes, inclusive a los propios trabajadores de la Alcaldía, lo cual de nuevo arroja a que hay una muy mala administración en la gestión municipal”, apunta el analista.
Esta significa, asevera, que se está a punto, “si es que no está”, de tener una Alcaldía quebrada.