Luciendo un guardatojo y en medio de pancartas y gritos de “Lucho, no estás solo carajo”, el presidente Luis Arce liderizó este miércoles la marcha de la Central Obrera Boliviana (COB) en conmemoración del Dia del Trabajador, en Cochabamba.

La marcha partió desde la plaza San Sebastián y recorrió las principales vías de la ciudad hasta llegar a la plaza 14 de Septiembre, donde el Jefe de Estado dio su mensaje de homenaje a los trabajadores, por su día.

Lo acompañaron el vicepresidente David Choquehuanca, el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi; autoridades de Gobierno y representantes de organizaciones sindicales y sociales.

La avenida Heroínas se colmó de gente que mostró carteles y respaldo al Presidente cuando hizo su paso por ese sector. Otro grupo, más reducido, protestó mostrando escritos y reclamando por la “falta de divisas” y la política económica del Gobierno.

Mineros, fabriles, artesanos y cientos de trabajadores de varios departamentos se hicieron presentes en la masiva marcha y saludaban efusivamente al presidente Arce cuando pasaban por el palco principal y haciéndole sentir su apoyo al grito de “Lucho, no estás solo carajo”.

Lucho Arce

Alrededor de la testera también se ubicó la población que cantó y bailó al son del grupo femenino Surimana, que deleitó con varios temas del folklore boliviano.

Como en el Día del Estado Plurinacional y el aniversario del Movimiento Al Socialismo (MAS), en La Paz, el viejo dirigente masista Román Loayza estaba presente en el acto.

Fue llamativa la presencia del ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, y sus ya conocidos “guerreros azules”.

Los festejos por el Día del Trabajador se replicaron en varias regiones del país. En El Alto, encabezadas por la Central Obrera Regional (COR), decenas de trabajadores desfilaron. Lo propio ocurrió en la ciudad de La Paz y en Santa Cruz de la Sierra.

El Día del Trabajo es la conmemoración del movimiento obrero mundial, una jornada en que se realizan diferentes reivindicaciones sociales y laborales; a favor de los trabajadores y se recuerda a los mártires de Chicago, Estados Unidos; quienes ofrendaron sus vidas por lograr las ocho horas laborales en el mundo.