Esta nación que traspasa fronteras de Bolivia, Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil continúa enfrentando desafíos como la discriminación, la pobreza y la pérdida de sus tierras ancestrales.
eju.tv
Juan Carlos Véliz / La Paz
Ante la grave crisis climática y la amenaza de los incendios forestales, la nación indígena guaraní ha decidido alzar su voz y unirse en una lucha conjunta para proteger su territorio y el planeta. Además pidieron la integración a corredores interoceánicos para aliviar la pobreza.
«Trabajar en forma conjunta para afrontar y minimizar la crisis climática, protegerse contra los incendios, viendo que no afecte negativamente la economía y protegiendo el territorio ancestral por medio de caminos y recursos que permitan protegerlo», se lee en un pronunciamiento del Consejo Continental de la Nación Guaraní que se reunió en Santa Cruz el 23 y 24 de junio.
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Los guaraníes habitan la región desde hace miles de años, siendo uno de los grupos indígenas más antiguos y numerosos de América del Sur. Su historia está marcada por la resistencia a la colonización europea y la defensa de su territorio y cultura.
Esta nación que traspasa fronteras de Bolivia, Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil continúa enfrentando desafíos como la discriminación, la pobreza y la pérdida de sus tierras ancestrales. Sin embargo, también se han organizado y movilizado para defender sus derechos y fortalecer su autonomía.
En Bolivia se han reunido para demandar integración para el desarrollo económico de las comunidades respetando su cultura.
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«Estudiar y proponer la vinculación caminera, desde un punto de vista de la Nación Guaraní, uniendo todos los países con corredores camineros que vinculen todos los pueblos guaranís, como ser los caminos que integren Matto Grosso Brasil con Bolivia y Bolivia con Paraguay, a través de la carretera Roboré – Fortín Suárez Aranda – Ripio Blanco-Fortín Ravelo – Mayor Pablo Lagerenza, Boquerón, a través del corredor bioceánico de Brasil-Argentina-Chile», señala otra parte del pronunciamiento,
Con esa vinculación caminera que vinculará a los pueblos guaraníes y con accesos a los océanos Atlántico y Pacífico «se podrá tener un comercio justo para la comercialización de nuestros productos y se podrá también tener inversión para nuestros territorios elevando nuestra economía, sacándonos de la pobreza».
Además plantearon la formalización de la gramática guaraní previa socialización en las comunidades de la nación y exigieron a las autoridades de la justicia ordinaria que respeten el derecho de los indígenas establecidas en la Constitución Política del Estado de Bolivia, tratados internacionales y otras normas.