Pobladores de Apolo denuncian el aumento de la delincuencia, culpan a la minería ilegal

Una exautoridad de Apolo indicó que por la minería ilegal (del oro) muchas personas con antecedentes penales llegan a esta región del departamento de La Paz y cometen delitos sin miedo. Indicó que antes Apolo era un lugar tranquilo, pero ahora se ven muchos prostíbulos y el consumo de droga hasta en escolares.

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Captura de vídeo del atraco en Apolo.

 

La Paz, 21 de agosto de 2024 (ANF).- Pobladores de Apolo denunciaron el aumento de la delincuencia en esa región del país con atracos a mano armada, como el ocurrido a fines de julio a una comercializadora de oro. Los robos menores de motocicletas e incursiones en casas se están haciendo frecuentes y el conflicto con la minería ilegal, del que participan personas buscadas por la justicia, ha ido dejando muertos.



“Últimamente, está habiendo mucha delincuencia, cada día se está perdiendo una moto, Apolo no era así, era un pueblo muy tranquilo, con esto de la minería ilegal hay mucha delincuencia, hay robos en casas alejadas, están sacando garrafas, televisores, la gente llega del campo y encuentra su casa abierta y vacía”, denunció la presidenta de los comerciantes de Apolo, Aydee Mendoza.

El último atraco a una rescatadora y comercializadora de oro generó en la población temor al tratarse de una banda delincuencial que opera en la zona sin que hasta la fecha haya sido detenido el cabecilla Erwin V. L. conocido como “Macacho”, buscado por la justicia por el presunto delito de asesinato de al menos tres personas y ahora por el atraco a la comercializadora. Por este último delito también viene siendo buscado Óscar F. Su hermana Cinthia F. ya fue aprehendida y guarda detención preventiva en la cárcel de Obrajes.

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“Es una preocupación, ya no tenemos seguridad, por ejemplo, mi casa está lleno de cámaras, pero ni la cámara sirve cuando se ponen la capucha, ya no se puede reconocer a la persona”, dijo a ANF.

Una exautoridad de Apolo, que pidió la reserva de su nombre, indicó que por la minería ilegal muchas personas buscadas por la policía y con antecedentes penales llegan a la zona y cometen abusos y robo sin miedo. Indicó que antes Apolo era un lugar tranquilo, pero ahora se ven muchos prostíbulos y el consumo de droga hasta en escolares.

“Hay mucha minería ilegal y ni Sernap (Servicio Nacional de Áreas Protegidas) ni AJAM (Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera) pueden hacer nada, normal entran y salen esas personas, hasta los chinos están trabajando y nadie les dice nada, trabajan con maquinaria pesada, con retroexcavadoras, por la minería ilegal ha llegado mucha gente que ni conocemos, muchos llegan a delinquir”, indicó a ANF.

El 24 de julio, cerca de las 23.00 horas, un grupo de atracadores robó una tienda comercializadora y rescatadora de oro, que además vende productos de primera necesidad, y se llevó al menos 100.000 bolivianos y más de un kilo de oro.

El grupo delincuencial conformado por 15 personas antes brindaba seguridad a una empresa minera en la comunidad de Laje, para lo cual portaban armas de fuego. El Macacho, líder de la banda, además del atraco a la comercializadora en Apolo, está siendo buscado por la muerte de tres personas.

Tras enfrentamientos en Laje, en el que resultó una persona muerta, las comunidades del sector le cerraron el paso a la policía y no permitieron ninguna investigación.

Por el reciente asalto a la comercializadora llegó a Apolo un grupo de 12 policías y allanó tres domicilios en las comunidades aledañas y solo aprehendió a la hermana de uno de los atracadores, que fue reconocido por las cámaras de seguridad.

 

La afectada, dueña de la comercializadora, lamentó la lenta reacción de la policía para dar con los responsables, que incluso festejaron el robo en una de sus casas.

“Es una banda de atracadores, a mi tienda entraron cinco personas, otro era el chofer y otra persona estaba afuera, Oscar (uno de los que es buscado) era el enamorado de la prima de mi marido, le hemos reconocido por los tatuajes, su mamá y su hermana saben muy bien del robo, luego del robo habían estado bebiendo en su casa, el atraco fue el miércoles y desde el jueves hasta el sábado habían tomado celebrando el robo, estaban en su casa en el barrio Porvenir y la policía recién se ha movido el sábado cuando ya se habían ido”, lamentó.

Indicó que la delincuencia ha ido en aumento en Apolo, y muchos de los que roban también son de comunidades del lugar, cercanas a la población, como Copacabana, de donde es Óscar F. y Santa Rosa, de donde es Macacho.

“El cabecilla está buscado por la justicia desde hace un año por haberle dado dos tiros a un apoleño, pero ha sobrevivido; y al año siguiente, en una fiesta en Charopampa, en Mapiri, mató a otro y escapó, tiene mandamiento de aprehensión”, dijo.

Indicaron que la cantidad de policías acantonados en Apolo es insuficiente. Antes tenían un solo vehículo, ahora son dos, pero les falta equipamiento y cada vez hay más delincuencia. “El problema también es que los cambian mucho, hay mucha rotación, cuando hay un caso y van investigando los cambian y el caso queda en nada”, lamentó la dirigente de los comerciantes.

El coronel Castrillo de la Policía Rural y Fronteriza indicó que fueron destacados 20 funcionarios policiales más a Apolo para realizar los controles y patrullajes respectivos. Informó que las investigaciones sobre el último atraco avanzan con allanamientos para dar con el paradero de los prófugos, pero no tienen información de que continúen más robos, al menos no como el atraco sufrido.

“No tengo la información del aumento de robos, se ha designado a 20 funcionarios policiales más a la localidad de Apolo, y se hacen los controles respectivos y patrullajes nocturnos, la policía está cumpliendo con los procesos investigativos, se tiene identificadas a las personas, se ha hecho operativos, se ha hecho allanamientos y no hay más bandas, no ha habido más denuncias de atraco de este tipo”, dijo a ANF.

Indicó que el tema de la explotación minera es el mayor problema, sobre todo en la época cuando se empieza a extraer el mineral, y “es ahí es cuando inicia el conflicto”.