El gobernador cruceño les recuerda que Bolivia se respeta, porque no será el campo de batalla en el que solucionen sus diferencias
Morales y Arce pasan por el peor momento en su relación. Foto: RRSS Camacho
Boris Bueno Camacho / La Paz
El gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho responsabilizó a Evo Morales y Luis Arce por la crisis que atraviesa el país y, no conformes con ello, ahora la profundizan con la confrontación interna por el control del Movimiento al Socialismo (MAS), que provoca la profundización de la difícil situación económica que afecta a las familias bolivianas por el incremento de los precios de los productos esenciales y no es atendida por la actual gestión gubernamental.
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A ello se suma la emergencia ambiental que enfrentan cuatro departamentos del país por los incendios forestales y la contaminación que conlleva, lo que ha movilizado a miles de personas para coadyuvar en la mitigación de los siniestros que han consumido aproximadamente cuatro millones de bosques y pastizales, según las estimaciones oficiales, aunque solamente cuando se pueda sofocar completamente las llamas se podrá tener una perspectiva real de la afectación.
“Evo y Arce se han convertido en el problema de nuestro tiempo. Han creado la crisis y ahora, con muchísima mezquindad, la profundizan. Los precios suben, el dinero no alcanza en las familias, los bosques se queman y ya comienza una migración masiva de nuestros hijos y nuestros jóvenes a otros países en busca de trabajo y oportunidades. Y mientras eso ocurre, Evo y Arce se dedican, en cuerpo y alma, a pelearse por cargos y a insultarse sin límites”, escribió Camacho en su cuenta de la red social X.
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Cuestionó también que esa pelea intestina del partido en función de gobierno afecte a la población en su conjunto tan solo -dijo- por los apetitos personales de ambos personajes que no miden las consecuencias que puede provocar su angurria de poder y que está orillando al país a un descalabro económicos con resultados impredecibles, sin reparar en las verdaderas necesidades y respuesta que necesita la sociedad boliviana.
“Por un lado, Evo Morales amenaza con bloqueos y marchas para seguir asfixiando la economía, y por otro, Arce defiende su cargo y sus privilegios, desafiando a golpes a su exjefe político. Insulto contra insulto, mientras Bolivia se desploma. Bolivia no puede ser la esquina donde dos masistas, borrachos de poder, se agarran a golpes e insultos por la presidencia. Bolivia es un gran país. Un país de gente valiente y trabajadora. Un país donde madres, padres, jóvenes y abuelos se levantan temprano a buscarle a la vida cada día”, resaltó.
El líder cruceño dijo que, al contrario de los líderes enfrentados del MAS, en el país existen miles de bolivianos que buscan el progreso en base al trabajo, al emprendimiento y al estudio, quienes pasan un momento muy difícil en la actualidad al igual que el país, por ello, pidió desde su reclusión en el centro penitenciario Chonchocoro al actual gobernante y al exmandatario, respeto a la patria y al interés nacional que están por encima de ellos.
“Un país con ganas de progresar, con ganas de trabajar, con ganas de estudiar, con ganas y madera de campeón. Eso es Bolivia. Eso es la rojo, amarillo y verde. Un país y una nación que hay que respetar. A Arce y a Evo les digo con claridad desde la cárcel: ¡Bolivia se respeta! Les digo con claridad que cada boliviano merece el máximo respeto. Les digo con claridad que es hora de pensar en serio en la economía. Es hora de pensar en las miles y miles de familias que ya están pasando hambre en muchos sitios del país. Les digo con claridad que Bolivia es la patria y que la patria está por encima de ellos dos y sus líos por poder”, dijo.