El anuncio ocurre después de que el MAS de la facción leal al expresidente Evo Morales echó del partido al presidente Luis Arce y al vicepresidente David Choquehuanca.
eju.tv / Video: DTV
Juan Carlos Véliz / La Paz
Una por otra. Después de que la facción del MAS afín al expresidente Evo Morales expulsó del partido al presidente Luis Arce y al vicepresidente David Choquehuanca ahora el ala del MAS cercana al Mandatario estudia la posibilidad de asumir la misma acción porque Morales comete faltas graves contra de la normativa como el adelanto de las proclamaciones electorales.
«En los estatutos no dice en ninguna parte, expulsar a un Presidente o a un Vicepresidente, para una expulsión pasa justamente a una comisión de Ética y Disciplina. En la dirección nacional no existe una comisión de Ética y Disciplina, por eso estamos analizando como dirección nacional ver la situación, inclusive la militancia de Evo Morales porque está violando la conducta y disciplina en las autoproclamaciones», adelantó el dirigente Fidel Surco.
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El MAS evista resolvió el martes la expulsión directa del partido al presidente Arce y al vicepresidente Choquehuanca, y marchar desde Caracollo (Oruro) hasta La Paz para exigir la habilitación de Evo Morales como candidato para las elecciones generales de 2025 pese a los candados legales.
La justificación de la expulsión «definitiva» es la supuesta traición que cometieron ambos mandatarios «al pueblo boliviano y al proceso de cambio», «por no hacer vida orgánica en el instrumento” y por “convertirse al neoliberalismo”, entre otras causas.
Para Surco, la militancia de Morales también está en duda debido a los actos reincidentes de adelantamiento de campaña electoral.
«Podríamos expulsar en este momento a Evo Morales, en este momento nos da la tarea las organizaciones fundadoras o cualquier militante lo puede hacer, este proceso ante el Tribunal Supremo Electoral, las cosas están abiertas. En este momento no tenemos comisión de Ética y por tanto cualquier militante activo puede hacer un proceso disciplinario», explicó Surco.
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El MAS, partido en función de gobierno, sufre una fractura interna que dividió al instrumento en dos facciones: evistas y arcistas. Ambas disputan el control de la dirigencia nacional del partido que emergerá de un congreso partidario convocado por la dirigencia nacional prorrogada encabezada por Morales y los fundadores que respaldan a Arce.
Sin embargo, dichas corrientes no encuentran consensos.
El TSE amplió hasta el 20 de diciembre para que los partidos renueven sus directivas y adecuen sus estatutos, otra oportunidad para el partido que llevó a la presidencia a Morales (2006-2019) y a Luis Arce (desde 2020) encuentre una salida a su conflicto.
