El Presidente hizo un repaso a factores que causan la escasez de dólares y carburantes en el país como la falta de exploración petrolera en el gobierno de Evo Morales, caída de la producción de combustibles, dependencia de la importación de gasolina y diésel, aumento del precio internacional, la inflación mundial y otros.
eju.tv / Video: @LuchoXBolivia
Juan Carlos Véliz / La Paz
El presidente Luis Arce describió esta noche la coincidencia inusual de varios factores que se asemejan a una «tormenta perfecta» y que azotan la economía del país como la caída de la producción de hidrocarburos,
El presidente Luis Arce describió esta noche cómo varios factores coincidieron inusualmente en lo que se asemeja a una «tormenta perfecta» que azota la economía de Bolivia, principalmente en lo que se refiere a la escasez de dólares.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
El presidente Luis Arce describió esta noche una «tormenta perfecta» o la coincidencia de varios factores que escapan supuestamente a su control que azota la economía de Bolivia, principalmente en lo que se refiere a la provisión de dólares.
«El origen y causa de la falta de dólares y combustibles en Bolivia» tituló la presentación del también economista y docente universitario, y que se transmisión en sus redes sociales y los medios estatales.
Uno de esos factores fue el «descuido de la nacionalización de los hidrocarburos» que generó una caída sostenida de la producción de petróleo y gas natural desde 2014, cuando Evo Morales era presidente del país.
En 2014, la producción de petróleo y condensado fue de 18,6 millones de barriles anuales, pero en una década cayó en 54% y en 2023, Bolivia produjo solamente 8,6 millones de barriles anuales.
La producción de gas natural tuvo un similar comportamiento. En 2014, Bolivia registró una producción de 21.766 millones de metros cúbicos de gas y en 2023 esta cifra mermó en 40% y se anotó una producción de 13.122 millones de metros cúbicos.
La causa: el agotamiento de los pozos petroleros y la falta de exploración de nuevos yacimientos.
La disminución de ambos recursos estratégicos de Bolivia generó la caída de las exportaciones de hidrocarburos y en consecuencia un menor ingreso de divisas.
El volumen de exportación de gas entre 2014 y 2023 cayó en 54% mientras en valor fue de 66%, es decir en 2014 se exportó gas natural por 6.011 millones de dólares mientras en 2023 se exportó por un valor de 2.050 millones de dólares.
Otro factor que explica la escasez de dólares en Bolivia es el desbalance entre una menor producción de diésel y gasolina, y una mayor importación de combustibles debido al crecimiento del consumo nacional.
En 2014, el consumo de gasolina automotriz era de 8,8 millones de barriles mientras en 2023 esta cifra ascendió a 14,5 millones de barriles. Actualmente Bolivia importa el 56% de la gasolina que consume y sólo produce el 44%.
En diésel, el panorama es aún más complicado. El país importa el 86% del carburante y sólo produce el 14% y a esto se suma el crecimiento del consumo. En 2009, se registró un consumo de 7,8 millones de barriles cuando el país producía el 50% de ese hidrocarburo mientras en 2023, el consumo ascendió a 15 millones de barriles y la importación saltó a 86%.
Después Arce describió que se registró una mayor importación de combustibles a precios más caros y por supuesto que los mermados ingresos que va captando el país se destina principalmente a la importación de combustibles, que además están subvencionados en Bolivia.
También puede leer: Como un profesor, Arce explica las causas de la crisis en hidrocarburos y la falta de dólares
Entre 2014 y 2023 hubo un incremento de 127% en la importación de barriles de combustibles y el valor de la importación también siguió el mismo patrón aunque con un porcentaje de 160%. «Ahora importamos más volúmenes con un precio alto», describió el Mandatario.
La causa: Incremento de los precios internacionales del petróleo después de la pandemia.
Después incidió en el sabotaje de la Asamblea Legislativa en la aprobación de al menos 1.077 millones de dólares en créditos externos que podrían inyectar dólares al país.
Después habló de la inflación mundial, ahora todo está más caro a diferencia de años anteriores e incluso los fletes marítimos subieron de precio.
A este factor se sumaron, según Arce, los fenómenos climatológicos de La Niña y El Niño que incidieron en la producción de alimentos y los precios en el mercado.
Una «tormenta perfecta» que golpea Bolivia.
