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El Kirchnerismo está sufriendo el peor momento de su historia en Argentina, tras la ratificación de la condena de seis años de prisión a Cristina Fernández de Kirchner y su inhabilitación para ocupar cargos políticos, algo que puede ser reclamado al Tribunal Supremo. Pero ahora llegó otro varapalo.
El presidente de Argentina, Javier Milei, ha iniciado una controvertida medida al ordenar la retirada inmediata del busto del expresidente Néstor Kirchner del edificio de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES).
Según el gobierno, este acto simboliza un rechazo a lo que califican como «autoritarismo». Además, Milei anunció que se eliminarán bustos y símbolos similares de Kirchner en todo el país, con el plan de fundir las figuras removidas.
Así es el proceso de «deskirchnerización»
Esta decisión forma parte de un plan más amplio del gobierno de «deskirchnerizar» los espacios públicos, argumentando que estos monumentos han sido utilizados como herramientas de propaganda política por las administraciones previas.
La vicepresidenta Victoria Villarruel, también en línea con esta política, recientemente ordenó retirar un busto de Kirchner del Senado, indicando que «no hace falta que esté en un lugar de privilegio» y reafirmando la necesidad de representar a todos los argentinos, no solo a un sector político.
El subsecretario de Prensa, Javier Lanari, fue el encargado de dar la noticia con un víde publicado en sus redes sociales: «En los edificios públicos ya no se rinde homenaje a corruptos, saqueadores del Estado ni líderes de asociaciones ilícitas. Hoy, en la ANSES, se tomó la decisión correcta», escribió.
La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, ha sido una de las más críticas con esto: «En el día de hoy se retiró el busto del expresidente Néstor Kirchner que se encontraba en las oficinas de Anses de la Avenida Paseo Colón», escribió en un tuit publicado este viernes.