“La soya se nos está fregando. Una lluvia más y muchos productores van a perder”, sostuvo un dirigente soyero al referir que la falta de diésel tiene contra la pared al sector productivo.
Fuente: Unitel
Con el pronóstico de nuevas lluvias a partir de este lunes en el departamento cruceño, se desata el temor y la intranquilidad entre el sector soyero que aún no concluyó la cosecha de invierno y los cultivos se pueden perder si es que el agua alcanza nuevamente a los campos, en donde las operaciones se han visto paralizadas debido a la falta de diésel. Hay 160.000 hectáreas en riesgo.
Hay preocupación debido a que la soya se puede echar a perder por no ser cosechada a tiempo
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Así lo reportó el el vicepresidente de la Cámara Agropecuaria de Pequeños Productores del Oriente (Cappo), Demetrio Pérez, al referir que hay más del 30% de la soya de invierno sin cosechar y no se sabe si este porcentaje se va a perder (dependerá de la intensidad de las lluvias).
“Esta soya está lista para cosechar. Si no se cosecha hasta el domingo, es muy probable, si llega la lluvia, que se pueda tener una pérdida total, porque las mejores soyas con mayor rendimiento están en las zonas bajas”, sostuvo el ejecutivo.
Por su parte, el especialista en meteorología Luis Alberto Alpire manifestó que desde este lunes se esperan lluvias de moderadas a fuertes en las provincias Obispo Santistevan y Sara, ambas regiones de carácter productivo y donde está concentrada el 90% de la soya sin cosechar.
“Son 160.000 hectáreas y va a llover toda la semana y eso supone que los riesgos son inminentes para que se humedezca, se pudra y se pierda toda la soya, que no solamente va a ser un perjuicio para el productor, también va a ser para el país porque se va a dejar de procesar esa soya que se transforma en aceite y en torta de soya y que se exporta”, dijo Alpire.
Por su parte, el dirigente soyero Eliazer Arellano también consideró que las próximas lluvias acabarán por arruinar la cosecha de los granos que aún continúan en el campo y hay desesperación debido a que los productores hacen filas hasta por cuatro días para recibir 200 litros de diésel, cantidad que no abastece.
La soya se nos está fregando. Una lluvia más y muchos productores van a perder. Y el banco no va a perdonar esas deudas. Todos los días, pedimos que nos llegue diésel. Estamos sin dormir, haciendo cola (en los surtidores), pero el diésel no llega”, sostuvo Arellano.