El obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de La Paz hizo un llamado a la preparación espiritual para la llegada del Niño Dios.
Fuente: ANF
“Navidad es mucho más que luces, regalos o banquetes. Es un tiempo de humildad, fe y amor sincero hacia los demás”, expresó el obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de La Paz, Mons. Pedro Fuentes, en su homilía en este cuarto domingo de Adviento, celebrada en la Basílica Menor “Nuestra Señora de Los Ángeles” (San Francisco).
“Sabemos que, para muchos, llenar la olla en estas fechas no es fácil. Pero lo importante no está en lo que pongamos en la mesa, sino en reunirnos con nuestros seres queridos y celebrar con fe el nacimiento de Jesús”, exhortó a los asistentes a la misa.
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Preguntó ¿Qué se le pone a la picana? Y respondió: “Ahora estamos pasando por un momento muy crítico, no da, yo creo. Pero aquellos que puedan bendito sea Dios”.
El obispo recordó el significado profundo del nacimiento de Cristo en la humilde aldea de Belén, una elección que manifiesta el estilo de Dios, es decir, preferir lo pequeño, lo sencillo y lo humilde. “Belén, pequeña e insignificante, fue el lugar elegido para el mayor acontecimiento de la historia. Dios se manifiesta en lo sencillo, no en las grandezas humanas. Así también, en nuestras vidas, Él nace en los corazones humildes y agradecidos”, transmitió.
Con el ejemplo de María, quien con fe y valentía aceptó el plan de Dios y acudió en ayuda de su prima Isabel, Mons. Fuentes destacó que la fe auténtica lleva a la acción caritativa. “María nos enseña que el amor a Dios se traduce en servicio. Hoy más que nunca debemos mirar a nuestro alrededor y tender una mano a quienes enfrentan mayores necesidades; migrantes, familias empobrecidas y los que sufren. Siempre tenemos algo para dar, por pequeño que sea”, dijo.
Animó a los fieles a vivir la Navidad con fe profunda, reconociendo a Dios en los momentos difíciles y en los desafíos personales y sociales. “Aunque pasemos por pruebas, no perdamos la esperanza. Somos gente de fe, y la fe nos da la fuerza para seguir adelante, dejemos que el misterio de la Navidad nos renueve y nos inspire a trabajar por un mundo más justo y fraterno”, pidió.
Invitó a todos a contemplar el misterio del nacimiento de Cristo, dejando que esta celebración despierte la sensibilidad del corazón. “¿Has soñado con un mundo más justo, con una familia unida o con un corazón libre de errores que hieren a otros? No dejes esos sueños en el aire; trabaja por ellos desde tu fe. La Navidad nos impulsa a hacer realidad estos anhelos”, profundizó.
/ERA
Fuente: ANF