El director nacional de la Felcc, Walter Sossa, confirmó la aprehensión de ambos subalcaldes dentro de las investigaciones por el desastre registrado en la zona Bajo Llojeta.
eju.tv / Video: DTV
Luego de prestar su declaración informativa durante toda la tarde de este viernes, los subalcaldes del macrodistrito de Cotahuma del municipio de La Paz, Gonzalo G. S., y del Distrito 6 de Achocalla, del departamento paceño, Juan Carlos A. M., fueron remitidos a las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) a la espera de su audiencia cautelar por el caso que tiene que ver con la mazamorra de Bajo Llojeta.
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En imágenes televisivas se observa cómo ambos funcionarios son trasladados a las celdas policiales. Pese a que a ambos se les pregunta si se declaran inocentes, ninguno responde ante la consulta de la prensa. Desde la Fiscalía no se emitió informe al respecto sobre el horario de la audiencia cautelar, que se prevé sea el fin de semana.
El director nacional de la Felcc, Walter Sossa, confirmó la aprehensión de ambos subalcaldes dentro de las investigaciones por el desastre registrado en la zona Bajo Llojeta.
“Ambos fueron aprehendidos por la comisión de delitos de otros estragos, incumplimiento de deberes y agravantes a otros estragos por el deslizamiento de Llojeta, toda vez que uno de ellos emitió una licencia de funcionamiento y en el otro caso, presuntamente conocía sobre la fractura de un bóveda que colapsó y no hizo ninguna acción”, informó la autoridad policial.
Agregó que más personas serán convocadas, tomando en cuenta que el trabajo de investigación continúa. Entretanto, en exteriores de las oficinas de la Felcc, un grupo de personas realizó vigilia para pedir que se libere al subalcalde del Macrodistrito de Cotahuma, lo que hizo que la Policía resguarde el predio.
El caso tiene que ver con un hecho que se registró a fines de noviembre pasado cuando una lluvia cayó en el sector arrastró el material que supuestamente había sido removido sin autorización de las autoridades por obreros de Inmobiliaria Kantutani. La mazamorra cubrió al menos 40 viviendas de la zona, además de ocasionar la muerte de una niña de cinco años.
