Aunque apenas inicia la temporada de lluvias, ya los habitantes de varias regiones del país están sufriendo los estragos de la crisis climática
Fuente: El Deber
Solo treinta minutos de precipitación bastaron ayer para que varias alcantarillas colapsen en Cochabamba y para que nuevamente las calles y avenidas queden anegadas, al punto que los vecinos tuvieron que desaguar sus casas y negocios con baldes, especialmente en la zona sur de la ciudad, una de las más afectadas.
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Otra vez los habitantes de la calle Ayacucho, esquina Esteban Arce, sufrieron con las lluvias, junto con barrios como las OTB San Antonio y Base Aérea, y también Tamborada.
El departamento paceño acapara 11 municipios afectados por las lluvias, según el reporte del Viceministerio de Defensa Civil (Videci). En la lista figuran Palca, Calacota, Apolo, Ichoca, La Asunta, Luribay, Quime, Yaco, Santiago de Machaca, Sapahaqui y Umala. En el norte paceño, la riada incluso cobró la vida de dos mineros arrastrados por el caudal del río.
El Videci además informó que, en Beni, otra zona muy afectada por las intensas lluvias es Loreto. En este mismo departamento, los indígenas de cinco comunidades tsimanes de la Reserva Estación Biológica del Beni se encuentran con sus viviendas anegadas y con sus cultivos dañados por el desborde del río Maniqui.
En Chuquisaca, el municipio de Monteagudo se declaró en desastre por el desborde del río San Miguel del Bañado, que tumbó un puente, y obligó a habilitar una ruta alterna para restablecer parcialmente el tránsito vehicular hacia Huacareta.
Aunque apenas inicia la temporada de lluvias, ya los habitantes de varias regiones del país están sufriendo los estragos de la crisis climática.
Fuente: El Deber