El documento difundido por la agencia especializada advierte sobre el incremento sostenido de fallecimientos en desplazamientos internacionales y señala la imposibilidad de cuantificar con precisión los casos ocurridos en territorios sin cobertura oficial.
Por Maricielo Grados Córdova
Fuente: Infobae
Al menos 8.938 personas murieron en rutas migratorias a nivel mundial durante 2024, según datos publicados por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), agencia de Naciones Unidas con sede en Ginebra. La cifra representa un récord histórico desde que la OIM comenzó a recopilar esta información en 2014.
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El informe, difundido el 21 de marzo a través del proyecto Missing Migrants, advierte que el número real de víctimas podría ser superior, debido a que muchas muertes no son reportadas ni documentadas. En su comunicado oficial, la OIM señaló que el total de fallecimientos corresponde a personas que perdieron la vida durante desplazamientos internacionales, muchas de ellas en condiciones irregulares y en rutas de alto riesgo.
“El aumento de muertes es significativo, pero aún más lo es que miles de personas permanezcan sin identificar”, afirmó Julia Black, coordinadora del proyecto Missing Migrants, citada por AP News. El año 2024 marca el quinto consecutivo con un incremento en el número de migrantes fallecidos a nivel global.
Regiones con más muertes de migrantes en 2024, según la OIM
Según los datos más recientes de la OIM, Asia fue la región con más muertes de migrantes en 2024, con 2.788 fallecidos, seguida del mar Mediterráneo con 2.452 y África con 2.242. También se registraron 341 muertes en el Caribe, una cifra sin precedentes, además de 233 en Europa y 174 en la selva del Darién, frontera natural entre Colombia y Panamá. Esta última cifra también constituye un nuevo máximo histórico en esa ruta, de acuerdo con la base de datos del proyecto Missing Migrants.
Desde 2014, la OIM ha documentado más de 73.000 muertes de migrantes en todo el mundo. Más de la mitad de estas ocurrieron en rutas hacia Europa, especialmente en el mar Mediterráneo, donde persisten naufragios frecuentes y desapariciones sin registro. Los datos pueden consultarse públicamente en el portal oficial del proyecto.
¿Cómo afecta Estados Unidos al sistema de ayuda humanitaria para migrantes?
El aumento en la cifra global de fallecimientos ocurre pocos días después de que la OIM informara la suspensión de múltiples programas humanitarios debido a recortes presupuestarios liderados por Estados Unidos. En un comunicado publicado el 18 de marzo, la agencia confirmó la cancelación de actividades en varias regiones de alto tránsito migratorio y la desvinculación de cientos de trabajadores humanitarios.
Amy Pope, directora general de la OIM, declaró que los recortes ponen en riesgo las operaciones críticas para atender a migrantes en situación vulnerable. “Estamos tomando decisiones difíciles para continuar con operaciones esenciales, pero los fondos disponibles no son suficientes”, dijo Pope durante una conferencia de prensa, citada por Reuters el 20 de marzo.
Según cifras oficiales del Departamento de Estado, la contribución financiera de Estados Unidos a la OIM se redujo más de un 30 % en 2024, en comparación con el año anterior. Estos recortes afectan la capacidad operativa en zonas como África, Medio Oriente, Asia y América Latina, donde la OIM administra programas de retorno voluntario, atención médica de emergencia y búsqueda de desaparecidos.
Muertes en la selva del Darién en 2024: nuevo récord en ruta hacia Estados Unidos
Uno de los corredores más letales en América es la selva del Darién, que conecta Colombia con Panamá y constituye un tramo clave para migrantes que se dirigen por tierra hacia Estados Unidos. En 2024, la OIM registró 174 muertes en esta zona, superando los registros de años anteriores y estableciendo un nuevo récord desde que se monitorea esta ruta.
Los migrantes que atraviesan el Darién provienen en su mayoría de Venezuela, Haití, Ecuador y otros países de América Latina y el Caribe. La ruta implica varios días de caminata en condiciones de selva densa, sin acceso a alimentos, agua potable o atención médica. Además de las muertes por causas naturales, se reportan de manera recurrente desapariciones y actos de violencia, según informes del Servicio Nacional de Migración de Panamá.
Estados Unidos ha intensificado su cooperación con Colombia y Panamá para tratar de frenar el flujo por esta ruta. En julio de 2024, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció medidas conjuntas de vigilancia, aunque el número total de migrantes que cruzaron el Darién ese año superó las 500.000 personas, de acuerdo con estadísticas panameñas citadas por la agencia Reuters.
¿Cuántos migrantes murieron en el Caribe intentando llegar a EE.UU.?
El Caribe fue otra de las regiones con un aumento significativo de muertes de migrantes en 2024. Según la OIM, 341 personas fallecieron durante intentos de travesías marítimas, principalmente desde Haití, Cuba y República Dominicana hacia Estados Unidos, a través de rutas hacia Florida o Puerto Rico. La cifra supera ampliamente las 245 muertes registradas en 2023.
La Guardia Costera de EE.UU. interceptó más de 12.000 personas en el Caribe entre enero y diciembre de 2024, según su informe operativo anual publicado en enero de 2025. Muchas de las embarcaciones eran pequeñas, sobrecargadas y sin condiciones de seguridad mínimas. La mayoría de los interceptados fueron deportados a sus países de origen, mientras que otros casos terminaron en desapariciones o naufragios.
Las autoridades estadounidenses han mantenido operativos de patrullaje constante en el estrecho de Florida y otras rutas del Caribe. Sin embargo, la falta de vías legales para solicitar asilo o migrar hacia EE.UU. ha llevado a que muchas personas opten por rutas de alto riesgo, de acuerdo con declaraciones de voceros de la OIM recogidas por AP News.
¿Cuáles son los factores que contribuyen al aumento de muertes de migrantes?
La OIM ha identificado múltiples factores que explican el aumento sostenido de muertes entre migrantes a nivel global. Entre ellos se encuentran la ausencia de rutas legales, la criminalización de los desplazamientos irregulares, los altos costos impuestos por traficantes y coyotes, y la falta de coordinación entre países de origen, tránsito y destino.
Los recortes presupuestarios, como los impulsados por Estados Unidos, también inciden en la capacidad de respuesta ante emergencias, búsqueda de desaparecidos, identificación de cuerpos y asistencia médica en zonas de alto tránsito. Estas limitaciones fueron expuestas por la OIM en su comunicado del 21 de marzo.