En lo que va del año. Insumos como dentífrico, champú, jaboncillo y otros tienen un incremento importante. Clientes y vendedores expresan su preocupación, porque el alza no se detiene.
Comprar productos como pasta dental, jaboncillo, champú, pañales o toallas higiénicas se hace cada vez más costoso, pues los precios no dejan de subir. En lo que va del año, el costo de algunos de estos productos de primera necesidad ha llegado, incluso, a duplicarse. Compradores y vendedores muestran preocupación ante un alza que no parece detenerse.
“Ya no se puede comprar nada, solo queda llevar lo básico, cambiar de marca y tratar de ahorrar. Todo está caro”, señaló Humberto Tórrez, un ciudadano que se encontraba de compras en la calle Garcilaso de la Vega, punto de abasto de productos de limpieza.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo, respecto a febrero, fue de +1,71%. Asimismo, la variación acumulada alcanzó el 5%. Sin embargo, el aumento de precios en varios productos no se siente en la misma magnitud, sino mucho mayor.
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“Sigue subiendo, el incremento es alto. Cada semana, los distribuidores (en cada entrega) nos dejan los productos con un nuevo incremento. Antes podíamos comprar por cantidad y tener rebaja, pero ahora el alza es tajante, ya no se puede conseguir mejores precios y eso aumenta los precios. En comparación con principios de año, estamos casi al doble”, afirmó Ángela, una de las vendedoras.
Lo que más sube
“El dentífrico… es lo que más ha subido. Para mi hijo compraba el Colgate de cajita roja, con unos 23 o 25 bolivianos. Ahora está a 48. Hace unas dos semanas me dijeron hasta 50 bolivianos en el mercado de Villa Fátima. Para mí, compraba el de dientes sensibles, pero ahora para los dos llevaré otro más simple… y solo uno”, explica Rosario Alcón, en uno de los puestos de venta que, además, ofrece productos por cuarta docena.
De acuerdo con un análisis del Centro de Estudios Populi, basado en datos oficiales del INE, hasta marzo había al menos 25 productos que mostraron un mayor incremento en comparación con el año pasado. Entre ellos, nueve son insumos de higiene personal.
Este grupo de insumos está liderado por la pasta dental, con un 37,88% más caro que el año pasado. Le siguen los pañales desechables para bebé con 34,92%, el jabón con 34,12%, el jaboncillo con 34,09%, el champú en frasco 27,6%, el antitranspirante 27,44%, las toallas higiénicas 21,73%, el ambientador 21,15% y el cepillo de dientes 19,64%.
A la vendedora la decisión de Rosario no la tomó por sorpresa, pues muchos de sus clientes buscan ofertas más económicas. Afirma que el precio de la pasta dental fue el que más subió, y no solo en un 37%, sino que, en algunos casos, casi se duplicó.
“Hay quienes buscan una marca en específico y es la que más ha subido. Ahora, el Colgate de caja roja, la cuarta, está saliendo a 43 bolivianos la unidad, antes era salido a 25. A los clientes no les queda otra que comprar la versión más básica o probar otras marcas, pero las conocidas igual han subido. Es algo básico para la casa, no pueden dejar de comprar”, explicó la vendedora.
Otro de los productos que está en el mismo rango de aumento son las toallas higiénicas femeninas. La cuarta docena en la marca Nosotras, en calidad media, la más común, ahora cuesta 42 bolivianos.
“A principio de año, las mismas toallitas, la cuarta docena, costaban de 24 a 26. Es casi la mitad. Las Kotex peruanas costaban algo menos, pero ahora están igual, porque el sol igual subió con respecto a los bolivianos. Ya no hay cómo escoger algo más barato. Todo ha subido”, afirma Yoseline, vendedora de productos para la higiene menstrual en la Garcilaso.
En su puesto tiene además unas marcas poco conocidas que antes eran las más económicas, de procedencia china. Ahora, esas también presentan incrementos.
Los pañales desechables también están entre los que más suben. “De golpe están 20 o 30 bolivianos más por paquete”, afirma una de las vendedoras.
Jaboncillos, champú y otros
Pero no solo son esos tres productos los que representan alzas. Si bien el incremento depende de la línea o marca, para que sea mayor o menor, lo cierto es que no hay producto que no haya subido su precio, sea importado o nacional. Y es que, aunque el producto se haga en el país, los insumos deben ser internados desde otros países.
Por ejemplo, en un sondeo de precios realizado por Visión 360, encontró que una botella de champú Selfie, uno de los más consumidos, pasó de costar de 20 bolivianos a 25. Los antitranspirantes en roll-on se pueden encontrar entre 18 y 21 bolivianos, antes se podía encontrar entre 14 y 17 bolivianos.
La cuarta docena de jaboncillos, ahora, cuesta 20 bolivianos, cuando antes se podía comprar en 16. Esto en un jaboncillo promedio, buscar algunos de marca y con propiedades específicas puede costar hasta más de 30 bolivianos.
“El problema es que son productos que no podemos dejar de usar; son de higiene personal y por tanto influyen en nuestra salud”, indicó Amalia Ramos, ama de casa.
Guerra, dólar, combustible
Yoselin señala que el alza viene desde el anteaño pasado e incluso antes, pero de una forma fluctuante. De repente subía, luego bajaba y ese ciclo se repetía, incluso por temporadas. Pero desde finales del año pasado, los precios ya no bajan, solo suben.
Los distribuidores y empresas les dicen a los vendedores que es por la comisión, por las transferencias, por las pérdidas al cambiar de bolivianos a dólares o por el transporte que ahora es más caro y difícil de conseguir por la falta de combustible.
“A veces piensan que nosotros subimos, pero ya llega con ese precio. Ahora ni de contrabando se puede encontrar barato. Porque el transporte cuesta por la falta de combustible y cambiar bolivianos a soles peruanos ya genera pérdidas. El contrabando viene del Perú y su moneda ha subido en comparación con la nuestra”, explica desde su puesto de venta.
El economista Carlos Augusto Aranda, de Populi, sostiene que ante incrementos tan elevados en productos esenciales, frecuentemente surgen explicaciones centradas en los intermediarios, la especulación o el agio.
Explicó que detrás del fenómeno inflacionario hay “una política monetaria expansiva destinada al financiamiento sostenido del déficit fiscal”.
“La inflación sostenida y generalizada en prácticamente todos los rubros del IPC, sumada al fuerte crecimiento anticipado en IPP e IPM, nos indica que no estamos ante incrementos puntuales o localizados, sino frente a un proceso claramente monetario”, precisó en su análisis.
Para entender mejor, debemos explicar qué son los dos índices que menciona.
El IPP (Índice de Precios Productor), que mide los precios en la etapa inicial de producción, alcanzó una preocupante alza anual del 15,7% a febrero, señal clara de que los costos iniciales seguirán empujando al alza los precios finales.
Por otro lado, está el IPM (Índice de Precios Mayoristas), que muestra un incremento anual del 12,54% en enero. Particularmente alarmante es el IPM de productos importados, con un aumento del 25,6% anual, impulsado por la constante depreciación del boliviano frente al dólar estadounidense.
“Ambos indicadores señalan que las presiones inflacionarias no son temporales ni coyunturales, sino generalizadas y en camino de prolongarse”, explicó Aranda.
Lo barato puede costar caro, tenga cuidado con los productos dentales
La pasta dental es uno de los productos que subió, lo que representa un problema para el bolsillo de las familias. Ante este panorama, han aparecido en el mercado ofertas de productos más baratos, pero poco conocidos o de dudosa calidad.
Si bien tener productos de menor precio mejora el acceso, usar productos no certificados o sin conocimiento de sus componentes puede causar daño|. La odontóloga Albandrea Terrazas advierte que puede haber desgaste del esmalte dental, riesgo de caries, irritaciones en las encías o elementos tóxicos.
“Muchos productos pueden ser alterados, modificados o imitados. Hay que ser cuidadosos de donde adquirirlos, ya que pueden estar vencidos o mal almacenados; contar con lugares confiables es algo fundamental”, explicó.
Lo primero es tener claro qué insumos básicos son necesarios para una buena higiene bucodental: cepillo de dientes, pasta dental, hilo dental y enjuague bucal. Para elegir esos productos es bueno saber si tienen registro sanitario o autorización del Ministerio de Salud.
“Es importante que la pasta dental contenga flúor y que los cepillos dentales sean de cerdas suaves a medias, no duras, dañan las encías y pueden ir desgastando el esmalte”, recomendó Terrazas.
Añadió que se debe investigar lo que uno comprará porque la salud bucal es muy importante. Son elementos de uso personal y tienen interacción con nuestro cuerpo.
“En la pasta dental el ingrediente principal es el flúor, fortalece el esmalte, remineraliza y reduce el número de bacterias. Debe tener una proporción de 1,000 a 1,500 ppm. Un niño de entre dos a seis años debe usar una pasta dental infantil porque tiene menos flúor”, detalló.
Añadió que los niños menores a dos años no deberían usar pastas, hay otros medios para cepillarles los dientes. Ver la proporción del flúor es importante porque si la pasta tiene demasiado puede producir fluorosis dental y esto mancha los dientes.
“En el enjuague bucal se puede usar algunos comerciales, pero que no contengan alcohol, a menos que esté indicado médicamente. Puede ser reemplazado con agua hervida o con agua en un vaso con 1/2 cucharilla de bicarbonato, pero esto de manera ocasional”, dijo Terrazas.
Explicó que el hilo dental es muy importante, porque saca los alimentos de entre los dientes donde el cepillo no puede llegar. Lo recomendado para principiantes son los encerados por su facilidad de uso. “Los hilos dentales sin cera también son muy efectivos, pero se necesita más técnica para su uso”.
Se debe tener cuidado con el uso del carbón activo ya sea directamente o en una pasta dental. “Puede tener un efecto blanqueador temporal ya que es abrasivo y es como si lijara los dientes”.
Recuerde, lo ideal es cepillarse los dientes de dos a tres veces al día. “Se debe hacer uso del hilo dental, antes del cepillado, entre todos los dientes. Se debe tener un cepillado de al menos tres minutos en cada lado de los dientes. Use enjuague bucal o enjuague con agua. Si es con agua debe ser solo para sacar el exceso de pasta, no profundamente ya que así dejará actuar al flúor”, dijo Terrazas.
Toda la canasta familiar sube, la carne es la más afectada
En un sondeo de precios de 21 productos alimenticios de la canasta familiar, realizado en marzo, la Defensoría del Pueblo identificó que, de agosto de 2024 a marzo de 2025, el precio del kilo de la carne de res se incrementó en más del 50% en siete departamentos. En el mismo periodo, la carne de pollo, la harina de trigo blanca y el aceite comestible fueron los productos con mayor comportamiento inflacionario.
“El alza de precios de productos de consumo general a nivel nacional está afectando el derecho a la alimentación de la población boliviana. En ese sentido, la Defensoría del Pueblo exhorta a las autoridades del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, Ministerio de Defensa, el Viceministerio de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor e Intendencias Municipales, desarrollar acciones destinadas a garantizar el abastecimiento interno, coordinar controles para evitar el agio y la especulación e intensificar la lucha contra el contrabando”, señala el documento.
De acuerdo con el informe, entre agosto del 2024 y marzo del 2025, el precio del kilo de la carne de res pulpa especial se elevó en 53%, en Trinidad y 50%, en Oruro; el kilo de la carne de res molida corriente incrementó 66% su precio en Trinidad, 56% en La Paz; y 53% en Cochabamba; y el kilo de la carne de pollo incrementó en 60% su precio en Sucre y 53% en mercados de Tarija y Santa Cruz de la Sierra.
Asimismo, el sondeo evidenció que el precio del kilo de la carne de pollo entero subió en cuatro departamentos: Sucre de Bs 20,10 a Bs 25,50 (26,7%); Potosí de Bs 22,16 a Bs 27,25 (23%); Santa Cruz de la Sierra de Bs 18,91 a Bs 22,58 (19,4%); y Cobija de Bs 26,00 a 29,66 (14,1%).
El azúcar granulada fue el producto más inflacionario, el precio de la libra subió hasta un 122% en la ciudad de Cochabamba, seguido de la harina de trigo blanca granel en Oruro (68,4%) y El Alto (38,2%), el aceite comestible a granel en Tarija (17,7%) y la carne de res molida corriente en Trinidad (16,7%) y La Paz (15%).