Los cárteles «contratan» o reclutan de manera forzada a expolicías y exmilitares de ese país para formar sus propios ejércitos.
Fuente: https://actualidad.rt.com
El Ejército mexicano detuvo a 17 sicarios, 12 de ellos de nacionalidad colombiana, presuntamente involucrados en la muerte de los ocho militares que el martes pasado fallecieron al activarse una «narcomina» colocada por miembros del crimen organizado.
Fuentes castrenses confirmaron al diario La Jornada, que el grupo de sicarios forma parte del cártel Los Reyes y fue detenido y neutralizado en una casa ubicada en el estado de Michoacán.
También aseguraron que los colombianos detenidos tienen conocimientos en la fabricación y manejo de explosivos, por lo que resta confirmar si cuentan con previa preparación militar o policial en su país.
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De hecho, se les decomisaron tres armas de fuego, dos vehículos que habían sido reportados como robados, cargadores de armas, cientos de cartuchos y material explosivo.
Múltiples investigaciones periodísticas han revelado que algunas de las organizaciones criminales más poderosas de México atraen a exmilitares y expolicías colombianos con falsas promesas de empleo legal para reclutarlos de manera forzada a sus filas y así crear ejércitos de élite.
Otros viajan a sabiendas de que se van a incorporar al crimen organizado, pero las autoridades todavía no han dado un reporte oficial de este nuevo fenómeno del narcotráfico mexicano.
En el caso de los ocho militares muertos, la tragedia ocurrió en los límites de los estados de Jalisco y Michoacán, que son controlados por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).