Hassenteuel enfatizó que en el camino hacia las elecciones de este año tropezaron con «varios escollos”, entre ellos: la falta de recursos para el voto en el exterior, incumplimiento de compromisos en la ALP, el clima de confrontación y amenazas y el acoso jurídico al TSE.
Durante la inauguración del IV Encuentro Multipartidario e Interinstitucional por la Democracia, el presidente interino del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Óscar Hassenteufel, remarcó su compromiso con la organización de unas elecciones nacionalestransparentes, inclusivas y pacíficas para el próximo 17 de agosto, pero también denotó sobre los graves obstáculos que enfrenta el órgano electoral para garantizar el desarrollo del proceso electoral en condiciones normales.
«En un anterior encuentro recalqué sobre la importancia de que este proceso 2025 se realice sin interferencia de ninguna clase, en el plazo previsto y en el marco de los principios de soberanía popular, igualdad, representación, pluralismo político y otros a los que se refiere el artículo segundo de la Ley 026. Pero, en ese camino hemos tropezado con varios escollos que no puedo dejar de mencionar», sostuvo Hassennteufel, durante su intervención.
Subrayó que el objetivo central del encuentro es consolidar la participación libre y voluntaria de toda la ciudadanía. No obstante, enfatizó que en el camino hacia las elecciones de este año tropezaron con «varios escollos” lo que comprometen la viabilidad del proceso electoral. Entre ellos: la falta de recursos para el voto en el exterior, el incumplimiento de compromisos de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), el clima de confrontación y amenazas y el acoso jurídico al TSE.
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En referencia al primer «escollo» afirmó que tiene que ver con la falta de recursos económicos oportunos para el empadronamiento y organización del voto de bolivianos residentes en el exterior. “Llevar adelante el empadronamiento fue una tarea de titanes; tuvimos que ahcer de malabaristas”.
Expresó que pese al respaldo de embajadores y ciudadanos bolivianos en el extranjero, los desembolsos de divisas se realizaron en función de su disponibilidad, lo que impidió incluso el pago oportuno de salarios a funcionarios. “Esto no puede seguir así. Garantizar las elecciones es una cuestión de Estado”, afirmó.
En el segundo caso, señaló que tiene que ver con la falta de avance en el paquete de leyes comprometido en el anterior encuentro multipartidario. Hasta la fecha, solo se aprobó la ley del TREP (Transmisión Rápida de Resultados). “Esto demuestra que no hubo suficiente voluntad de parte de la Asamblea Legislativa”, señaló Hassenteufel. En ese sentido, el TSE sugiere priorizar el tratamiento del crédito japonés y otras fuentes de financiamiento, esenciales para viabilizar la elección en el exterior.
El presidente interino del TSE también denunció un ambiente de creciente hostilidad, con marchas, bloqueos, asedios a las instalaciones del Órgano Electoral y amenazas contra la seguridad personal y familiar de algunos vocales. “Se trata de algo inédito en procesos electorales y todo por el capricho, la ambición o quizás la legítima aspiración de una persona o grupo que ha optado por la convulsión en vez de la legalidad”, lamentó.
Hassenteufel hizo un llamado a la racionalidad y exhortó a dejar los enfrentamientos entre bolivianos, en referencia a los cuatro policías fallecidos, tres en la ruta a Llallagua, en el norte de Potosí, y uno en la vía que conecta a Oruro con Cochabamba.
Sobre el cuarto punto, denunció el acoso jurídico al Órgano Electoral, que actualmente enfrenta decenas de acciones constitucionales, incluidas algunas que buscan reactivar la personería jurídica de partidos ya cancelados. Este escenario, señaló, añade presión e incertidumbre al proceso.
“El TSE reitera su compromiso con la democracia, pero no puede cargar solo con una responsabilidad que debe ser compartida por todo el Estado. Las elecciones son un asunto nacional y requieren respaldo político, legal, económico y ciudadano”, concluyó Hassenteufel, en referencia a las acciones lelgales asumidas por el partido de Pan Bol, que perdió su personería jurídica hace días atrás.