Evo Morales lanza advertencias a militares y ordena “seguimiento” a comandantes


Morales, sobre quien pesa una orden de aprehensión por trata y abuso de menores, permanece en Lauca Ñ, fuertemente custodiado por guardias sindicales cocaleros. No ha salido del lugar desde hace varios meses, y su discurso desde ese enclave se ha radicalizado en tono y contenido.

 

Evo Morales enfrenta un caso por estupro Evo no sale de Lauca Ñ. Foto: EFE



 

Fuente: El Deber

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

En medio de la creciente tensión social por los bloqueos de caminos que paralizan varias regiones del país, el expresidente Evo Morales tiene el punto de mira en las Fuerzas Armadas. En los últimos días identificó a jefes militares como objetivo de “seguimiento” y críticas.

Sucedió primero el domingo, cuando pidió a sus bases cocaleras “identificar” y “hacer seguimiento” al coronel Óscar Jaramillo Fernández, recientemente designado como comandante militar en el municipio de Shinahota.

“Identifiquen a ese comandante, hagan seguimiento de cómo se mueve, si está caminando, en qué dirección… cómo (quieren) atentar”, declaró Morales, en referencia directa al alto oficial, a quien acusa de liderar una supuesta operación de inteligencia para “destruir el radio de cultivo de coca” en el Trópico de Cochabamba.

Este llamado al seguimiento de militares —una tarea reservada exclusivamente a cuerpos estatales especializados en seguridad— se da justo cuando las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana ejecutan operativos conjuntos de desbloqueo en zonas convulsionadas como Parotani, Pirque, Vinto, en Cochabamba, y Llallagua en Potosí.

Las declaraciones llamaron la atención de políticos y jefes castrenses, por considerar que podrían constituir una incitación a la vigilancia ilegal, además de la confrontación con instituciones del Estado. También hay preocupación por las familias de los militares.

Más señales

Pero, el exmandatario no solo identificó a Jaramillo, sino que también aludió a otros altos mandos militares y policiales por nombre y apellido:

Al general Wilson Sánchez, jefe de Estado Mayor del Comando, lo acusó de intentar “cortar servicios básicos al Trópico” y lo tildó de “Diablo Sánchez”.

Al coronel Guarachi Morales, lo responsabilizó por enfrentar a movilizados en la zona de Parotani, mientras que a un ejecutivo del Segip de Cochabamba lo señaló como responsable de disparar en un operativo.

Y mencionó que el general Aguilar, comandante del Ejército, se habría reunido recientemente para “planificar la represión”.

Además, Morales aseguró que “más del 80% de los militares apoyan su proceso político” y afirmó que hace seguimiento constante a los mandos militares, revelando incluso supuestas reuniones entre jefes de las Fuerzas Armadas y del Órgano Judicial para debatir posturas entre el evismo y el arcismo,

Morales, sobre quien pesa una orden de aprehensión por trata y abuso de menores, permanece en Lauca Ñ, fuertemente custodiado por guardias sindicales cocaleros. No ha salido del lugar desde hace varios meses, y su discurso desde ese enclave se ha radicalizado en tono y contenido.

El presidente Luis Arce confirmó que instruyó un operativo policial y militar para desbloquear, inicialmente, la carretera Cochabamba-Oruro, que está obstaculizada desde hace 10 días por sectores evistas. “Hoy hemos instruido tanto a la Policía Boliviana, a través del Ministerio de Gobierno, como a nuestras Fuerzas Armadas, a través del Ministerio de Defensa, un operativo para desbloquear la carretera Oruro-Cochabamba”, dijo en una declaración de prensa.