Diferentes sectores de Llallagua piden ayuda y señalan que no tienen alimentos debido al cerco, advirtiendo también que los bloqueadores les cortaron el suministro de agua y amenazan con cortar la electricidad.
“¡Libertad para Llallagua!”. “¡El pueblo unido, jamás será vencido!”, resonaban las arengas y cánticos por las calles del municipio potosino de Llallagua, donde los vecinos dieron respaldo a las acciones policiales para levantar los bloqueos instalados por los ayllus afines al evismo en esta región.
En medio de la desesperación, los vecinos salieron a respaldar a la Policía en las acciones de desbloqueo tras varios días de cerco que paralizaron la región, impidiendo el ingreso de alimentos y con acciones que fueron denunciadas por diferentes sectores, como el corte en el suministro de agua y la amenaza de corte de electricidad.
El ingreso del contingente policial fue recibido con euforia por la población, aunque no estuvo exento de violencia, ya que los bloqueadores respondieron a estas acciones e hirieron a dos efectivos del orden; no se descarta que estén heridos de bala.
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“No tenemos agua, estamos sin nada, no tenemos nada en los mercados”, denunció una vecina, quien además reveló amenazas recibidas. “Han mandado audios diciendo que van a atacar, que ayer ha habido caídos y que hoy tienen que caer todos”, agregó.
Con cintillos blancos y banderas bolivianas, vecinos y universitarios organizaron vigilias para proteger sus barrios, advirtiendo que también se dieron afectaciones a la infraestructura de diferentes instituciones, incluso las dependencias policiales.
“Estos señores bloqueadores han venido a destrozar nuestros módulos de estudio (…) La escuela también han dinamitado”, denunció un joven estudiante, indignado por la violencia ejercida sin respetar a niños ni instituciones.