Informe revela el impacto de la inteligencia artificial y las encuestas manipuladas en la primera vuelta


Esa etapa estuvo marcada por una ola de desinformación digital: encuestas falsas, contenidos generados con inteligencia artificial (IA) y suplantaciones de medios se difundieron masivamente en redes como TikTok y Facebook.

Desinformación de las elecciones generales 2025. Gráfico: Bolivia Verifica

eju.tv



La campaña hacia la primera vuelta de las elecciones generales de 2025 en Bolivia estuvo marcada por una ola de desinformación que buscó moldear la intención de voto a través de estrategias digitales agresivas. Un análisis de Bolivia Verifica revela que, entre el 1 de enero y el 18 de agosto, se identificaron 242 contenidos relacionados con el proceso electoral, la mayoría falsos o engañosos, distribuidos principalmente a través de TikTok y Facebook.

La investigación fue extensa, porque su universo de estudio aglutinó 358 materiales analizados entre verificaciones simples y análisis de discurso, 242 de ellos se centraron directamente en lo electoral. De estos, 188 fueron verificaciones simples (154 clasificados como falsos y 24 engañosos) y 54 análisis de discursos públicos (30 falsos, 17 engañosos y 7 verdaderos).

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Fuente: Bolivia Verifica

Las tácticas empleadas fueron variadas: declaraciones falsas atribuidas a candidatos, encuestas inventadas o manipuladas, suplantaciones de identidad, uso de logos de medios reconocidos y generación de contenidos con inteligencia artificial (IA), incluyendo audios y videos deepfake. En particular, el uso de IA se concentró en julio, cuando alcanzó su mayor intensidad.

Los deepfakes o ‘falsedades profundas’ son archivos de vídeo, imagen o voz manipulados mediante un software de inteligencia artificial de modo que parezcan originales, auténticos y reales. Esta herramienta utiliza el aprendizaje de la inteligencia artificial, por lo que estos archivos consiguen engañar fácilmente; por ello, se utilizan para inducir a error a las personas receptoras y suponen una gran amenaza, ya que facilitan la desinformación y provocan que la ciudadanía desconfíe incluso de fuentes verificadas.

Gráfico: Bolivia Verifica

Respecto a las encuestas falsas, Bolivia Verifica las clasificó en tres tipos: las inventadas sin respaldo alguno, los sondeos en redes sociales sin rigor y los estudios reales cuyos resultados fueron adulterados para favorecer narrativas específicas. Entre los nombres más mencionados como primeros en intención de voto se encontraban Jorge Quiroga, Manfred Reyes Villa y Andrónico Rodríguez.

Y quienes más sufrieron los bulos fueron los candidatos Samuel Doria Medina, Andrónico Rodríguez y Jorge Quiroga, así como el Tribunal Supremo Electoral (TSE). Se les atribuyeron afirmaciones falsas como supuestos pagos para manipular encuestas, propuestas ficticias de privatización de bienes indígenas o alianzas con actores internacionales sin fundamento.

Gráfico: Bolivia Verifica

En cuanto a los canales de difusión, TikTok fue la plataforma más usada para diseminar videos producidos con efectos virales, seguida por Facebook (con gráficos y manipulaciones visuales), WhatsApp, X e Instagram. Además, se detectó la suplantación de medios como Unitel, Red Uno y El Deber para otorgar apariencia de credibilidad a los bulos.

Bolivia Verifica subraya que la desinformación no fue un fenómeno espontáneo, sino una campaña digital con patrones sofisticados y una clara intención política: moldear tanto las percepciones como el debate público. Se revela también una creciente tendencia de ‘cuentas carnada’, perfiles que emergen para difundir mentiras y luego son eliminados, lo que hace dificultoso el rastreo de su origen.