La elección de Rodrigo Paz provocó reacciones inmediatas en los mercados cambiarios: sube la cotización en el mercado paralelo.
Evolución del UDST. Foto: Correo del Sur
La confirmación de la victoria de Rodrigo Paz en la segunda vuelta despertó movimientos visibles en el mercado de divisas boliviano. Si bien el tipo de cambio oficial administrado por el Banco Central de Bolivia (BCB) continúa inamovible, la cotización en el mercado paralelo – la referencia no oficial que usa la gente cuando busca liquidez— se ha disparado y llegó a los catorce bolivianos para la compra, aunque posteriormente bajó hasta los Bs 13,50.
De acuerdo con el portal Dólar Bolivia Hoy, el tipo de cambio paralelo se ubicó en Bs 14 para la compra y Bs 13,90 para la venta alrededor de las 21.00 horas. Solo un día antes, el sábado, la cotización se mantenía en torno a Bs 12,80. Un comportamiento similar se observó en la página Dólar Blue Bolivia, donde el precio de compra alcanzó los Bs 13,95 y el de venta Bs 13,85. Durante la semana previa al balotaje, la cotización mostró una tendencia relativamente estable, porque no sobrepasó los Bs 13.
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¿Por qué reaccionó el tipo de cambio no oficial? Las causas son múltiples y contrastables: Durante la campaña y en declaraciones públicas, Paz se mostró dispuesto a impulsar reformas de signo más promercado que el Gobierno saliente, con medidas que podrían abrir la economía y modificar el manejo de tipo de cambio y subsidios. Esa expectativa afecta al mercado ante la incertidumbre sobre la transición y posibles ajustes en políticas macroeconómicas.
Bolivia llega a esta elección con presiones económicas importantes: alta inflación, caída de ingresos por hidrocarburos y la existencia de un mercado paralelo con cotizaciones muy por encima del tipo oficial. Informes internacionales y de inversión ya advirtieron sobre una brecha importante entre el tipo oficial y el mercado paralelo y sobre tensiones en las reservas. En mercados con estas características, un shock político eleva la demanda de dólares y presiona al alza la cotización paralela.
Las empresas y ahorristas que temen volatilidad o cambios rápidos en las reglas (subsidios, control de precios, acceso a divisas) suelen comprar dólares al menor signo de incertidumbre. Ese comportamiento no implica necesariamente una fuga permanente, pero sí eleva la cotización en el corto plazo, especialmente en canales informales. Los medios internacionales cubrieron además la expectativa de reformas que podrían implicar ajustes fiscales o monetarios, lo que refuerza esa conducta.
Las cotizaciones que publican sitios especializados en el “dólar blue” y el mercado paralelo mostraron movimientos al alza tras la jornada electoral; plataformas locales del mercado paralelo informaron aumento en la cotización, una respuesta habitual ante cambios políticos de calado. Estas plataformas actúan como termómetro de la demanda inmediata de divisas fuera del circuito bancario.
Los analistas coinciden en que la reacción del dólar paralelo es más una respuesta inmediata a la incertidumbre y a las coberturas de riesgo que el inicio incontestable de una crisis cambiaria permanente. No obstante, el riesgo de emisiones fiscales, necesidades de financiamiento o restricciones en las reservas podría transformar una subida temporal en un problema de mayor envergadura si no se adoptan medidas de estabilización. El punto crítico serán las primeras decisiones económicas del gobierno entrante.
El nuevo gobierno debe dar señales claras sobre metas fiscales, control del gasto y manejo del subsidio de los combustibles para disminuir el pánico y relajar la presión sobre el dólar paralelo. Si bien la subida del dólar en el mercado paralelo tras la victoria de Rodrigo Paz refleja una reacción racional de agentes económicos ante un cambio político que puede implicar reformas económicas, por ahora, es una señal de incertidumbre y cobertura de riesgo más que la confirmación de un colapso cambiario inmediato.
La diferencia entre la cotización oficial y la paralela, la salud de las reservas y, sobre todo, la claridad de las primeras medidas del nuevo gobierno definirá si el ajuste es transitorio o si obliga a intervenciones más profundas. Rodrigo Paz se ha rodeado de un equipo económico sólido que puede devolver la certidumbre a los mercados y a la población. Una señal clara fuerte de inicio permitirá que la cotización del dólar paralelo disminuya.