La evaluación del exlegislador es lapidaria y surge luego de que la diputada de Comunidad Ciudadana (CC) María Elena Ortega pidiera en una sesión que a ella y a todos sus colegas les den celulares nuevos «para irse tranquilos»
Por: eju.tv / Video: Que No Me Pierda
«El pueblo menciona que estos parlamentarios son verdaderos lagartos, sin ofender a ese noble animal». A esa conclusión llegó el expresidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, sobre el trabajo de los actuales miembros de la Asamblea Legislativa Plurinacional, que en su juicio es «inoperante».
La evaluación del exlegislador es lapidaria y surge luego de que la diputada de Comunidad Ciudadana (CC) María Elena Ortega pidiera en una sesión que a ella y a todos sus colegas les den celulares nuevos «para irse tranquilos» a sus casas al final de la gestión, que concluye el 8 de noviembre, cuando asuma el nuevo Gobierno.
«Lamentablemente ha sido una Cámara de Diputados, de Senadores, incipiente, improductiva, incoherente. Hemos visto pugilatos, peleas internas, falta de discurso, no han proyectado leyes que tengan un efecto social, que busque una transformación del Estado Plurinacional de Bolivia», afirmó.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
«Se han olvidado de la fiscalización, en sus narices han habido enormes actos de corrupción en las empresas públicas de nuestro país y lamentablemente hasta se olvidaron gestionar varios proyectos en beneficio de su región», añadió.
A la hora de establecer una nota de evaluación, afirmó que «de una calificación del 1 al 10, esta gestión se ha aplazado, ha reprobado con una mínima nota de 2».
Cada uno de los 130 diputados de la Cámara Baja, entre los que se encuentra Ortega, percibe un salario mensual de 22.633 bolivianos. Redondeado a 22.000 y por los 12 sueldos que reciben en un año, los legisladores tienen un ingreso anual de unos 264.000 bolivianos, suma que en los cinco años de permanencia en el cargo dan un total de 1,3 millones de bolivianos.
En ese maco, Borda planteó un ajuste a la escala salarial. El exparlamentario cuestionó la cifra de sesiones que llevaron a cabo en ambas cámaras en medio de pugnas y calificó como «inadmisible» que los legisladores reciban su salario completo pese a esas circunstancias.
«El Congreso, la Cámara de Diputados, no ha sesionado por un mes, dos meses y lamentablemente los sueldos han continuado percibiéndolos», enfatizó y sentenció: «En el reglamento debería establecerse que el parlamentario que no asista a un mínimo de sesiones no va a tener derecho a percibir su remuneración».
Explicó que para este ajuste no se necesita una ley puesto que es suficiente un ajuste en el reglamento del Legislativo aprobado por dos tercios de voto en esa instancia.