Ambos líderes de oposición cuestionaron la propuesta de cese de funciones de los vocales y exigieron garantizar la segunda vuelta.
El expresidente Carlos Mesa y el excandidato presidencial Samuel Doria Medina rechazaron este miércoles el «golpe parlamentario» denunciado por Luis Arce y exigieron garantías para que se lleve a cabo la segunda vuelta.
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Junto a su gabinete de ministros, el presidente Arce denunció este miércoles que en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) se encuentra en curso un plan que, a su juicio, constituye un «golpe a la democracia» promovido por algunos diputados y senadores que buscan suspender de sus funciones a los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
En consecuencia, pidió al Órgano Electoral convocar a un encuentro a los cuatro poderes del Estado para garantizar el balotaje del domingo 19 de octubre, que dará paso a la elección de un nuevo gobierno.
En la misma línea se pronunció Doria Medina, quien aseguró que su alianza «no permitirá que se escamotee la voluntad popular», en referencia al balotaje del domingo 19 de octubre.
«El presidente Arce ha denunciado un golpe parlamentario contra los vocales del Tribunal Supremo Electoral para impedir que se realice la segunda vuelta electoral. Parece descabellado, pero la audacia de los tinterillos masistas puede ser muy grande. Que acaben de una vez los manotazos de ahogado. El pueblo ya habló, el voto popular es irreversible», sostuvo Doria Medina.
El líder de Alianza Unidad indicó que apoya una reunión de los poderes y los partidos para ratificar la irreversibilidad del «cambio histórico de la política boliviana».