El exmandatario pide garantías legales para asistir a la ceremonia del sábado 8 de noviembre, cuando Rodrigo Paz y Edman Lara asumirán el mandato del Estado boliviano.
El expresidente Evo Morales afirmó este miércoles que fue invitado al acto de asunción del nuevo presidente y vicepresidente de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira y Edman Lara Montaño, previsto para este sábado 8 de noviembre en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP). No obstante, condiciona su asistencia al levantamiento del proceso judicial en su contra y a la anulación de las medidas que, asegura, buscan su detención por «un caso inventado».
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
“Como expresidente de Bolivia he sido invitado a la asunción de los nuevos mandatarios a realizarse en La Paz este sábado 8 de noviembre. Les deseo éxito para el bien de los bolivianos. Sin embargo, pido garantías para poder concurrir a dicho evento levantando el proceso judicial en mi contra y anulando las medidas ilegales que buscan mi detención por un caso inventado», manifestó Morales, a través de sus redes sociales.
El exmandatario indicó que, por principios de “justicia y legalidad”, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) debe disponer el cierre de los procesos abiertos en su contra, tal como, en su criterio, se benefició a los “autores del golpe de 2019”. En referencia a la disposición en favor de Jeanine Áñez, que en esta jornada se dispuso su libertad inmediata.
Actualmente, Morales tiene en su contra una orden de aprehensión y que debe ser ejecutada por la Policía Boliviana por el presunto delito de estupro. De manera paralela, el Ministerio Público de Tarija presentó una acusación formal por el delito de trata y tráfico de personas agravado.
La posición de Morales se da a pocos días de la ceremonia de posesión de Paz y Lara, que contará con la presencia de más de 40 delegaciones internacionales y se desarrollará en medio de un complejo escenario económico y social.
