La publicación se realizará en la portada del sitio web del BCB con la intención de servir como base objetiva para las decisiones de ciudadanos y empresas. La decisión llega tras meses de un escenario caracterizado por la incertidumbre y la circulación de cotizaciones dispares y, en muchos casos, especulativas.
En un movimiento dirigido a retomar las riendas del mercado de divisas, el Banco Central de Bolivia (BCB) anunció hoy (1°) que publicará de manera diaria un valor referencial oficial para el dólar estadounidense. La medida, calificada por la institución como el primer paso para «transparentar el mercado cambiario», busca establecer una referencia clara y confiable basada en las operaciones reales de compra y venta ejecutadas por los bancos y entidades financieras autorizadas (EIF).
Esto pone fin a un prolongado periodo en el que la autoridad monetaria se abstuvo de fijar una cotización oficial, dejando el campo libre a una multiplicidad de fuentes. Así, el objetivo declarado es doble al ofrecer información verificada y unificar el tipo de cambio para operaciones con el exterior, el que efectivamente utilizan las entidades financieras con sus clientes. El valor referencial de compra se calculará como el promedio ponderado de todas las transacciones del mercado mayorista, mientras que el de venta para operaciones internacionales representará el tipo de cambio máximo cobrable, que incluye los costos de transferencia.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
La publicación se realizará en la portada del sitio web del BCB con la intención de servir como base objetiva para las decisiones de ciudadanos y empresas. La decisión llega tras meses de un escenario caracterizado por la incertidumbre y la circulación de cotizaciones dispares y, en muchos casos, especulativas.
El comunicado del BCB reconoce explícitamente que la falta de una referencia oficial permitió la proliferación de valores provenientes de «fuentes no verificadas como plataformas virtuales, casas de cambio, librecambistas y otros actores», un fenómeno que generó confusión y distorsiones en la economía.
De esta manera, el Banco Central busca cerrar un capítulo de desorden informativo y ratificar su papel rector en la política cambiaria. La institución enfatiza su «compromiso institucional» para que la información llegue de manera clara y oportuna a todos los agentes económicos, esto con el objetivo de restaurar el orden en un mercado que había operado bajo una lógica fragmentada.