El dirigente panificador es acusado de desvíos de insumos de Emapa. El miércoles recibió detención domiciliaria mientras se investiga el hecho.
eju.tv / Video: RTP
Doña Nora vive en la calle Virrey Toledo, del barrio de Villa Victoria, en La Paz. Desde la anterior semana su nombre circula en los medios como la panadera que, pese al incremento, vende el pan a 50 centavos.
Al lado de su vivienda y de su horno vive y trabaja Rubén Ríos, el dirigente acusado de desviar los insumos de Emapa, en un negociado que le causó un daño millonario al Estado.
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«Cualquier cosa me puede hacer, por eso yo quiero una buena garantía, quisiera que se vaya a otra parte, mi vida corre peligro», afirmó la mañana de este jueves en el patio de su casa, desde donde mostró que la planta alta del inmueble comparte el muro y está a pocos metros de los ambientes de la vivienda de Ríos.
El dirigente panadero fue identificado como el presunto responsable de recibir grandes cantidades de harina subvencionada por el Gobierno para mantener fijo el precio del pan. Las investigaciones dan cuenta que esos insumos fueron acopiados y revendidos por el panificador, que la noche del miércoles 3 de diciembre recibió la detención domiciliaria.
«Tengo miedo, vive al lado, me han venido a amedrentar», contó Nora, quien cada día prepara 10 quintales de harina y comercializa el pan a 50 centavos.
Por estos días, la vivienda y el horno son resguardados por los vecinos y un guardia municipal, pero doña Nora teme lo que suceda después, cuando deba volver a sus actividades con normalidad.