La falta de preselección departamental podría paralizar la renovación del Órgano Electoral y trasladar la responsabilidad al nivel nacional.
La recepción de postulaciones en el TED Santa Cruz. Foto: Red Uno
La renovación de los nueve tribunales electorales departamentales (TED) depende de un paso clave, cada Asamblea Legislativa Departamental (ALD) remita a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) una terna por departamento para la designación de los nuevos vocales; sin embargo, varias regiones avanzan con retrasos y, si las ternas no son enviadas a tiempo, el país podría enfrentar un escenario de vacío institucional que afectaría directamente el calendario electoral 2026.
La normativa es clara. La Constitución Política del Estado establece que los TED deben estar integrados por cinco vocales, dos designados por la ALP y tres por cada ALD mediante ternas enviadas al nivel nacional. La Ley 018 del Órgano Electoral Plurinacional refuerza ese procedimiento. Sin esos tríos departamentales no puede completarse la designación de los TED, ya que la ALP no tiene facultad para suplir unilateralmente esa etapa.
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Es decir, si una ALD no envía su terna, el proceso de designación queda incompleto y se bloquea la conformación del TED. La ALP no puede nombrar vocales departamentales sin listas formales entregadas por las asambleas regionales. No existe en la ley una disposición para que la ALP supla o asuma esa responsabilidad. El Tribunal Electoral Departamental queda con acefalías y limita su funcionamiento.
De acuerdo con la Ley 018, los TED requieren un número mínimo de vocales para sesionar, aprobar resoluciones, emitir supervisión y organizar procesos electorales locales. Con menos de tres vocales, el tribunal no puede operar plenamente; si sucede este extremo en alguno de los departamentos, se afecta la organización del proceso electoral previo a las elecciones subnacionales programadas para el 22 de marzo de de 2026.
Los TED son los encargados de supervisar las organizaciones políticas departamentales, revisar padrones regionales, fiscalizar alianzas y frentes, administrar comicios municipales y departamentales. Sin la designación completa, la cadena operativa electoral queda truncada y obliga a aplazar fases preparatorias.
En La Paz la convocatoria no tiene mucho éxito. Foto: captura de pantalla
Las situaciones son disímiles en los departamentos. Por ejemplo, el proceso de selección de vocales para el Tribunal Electoral Departamental (TED) de Santa Cruz avanza en la Asamblea Legislativa Departamental (ALD), que hasta el lunes registraba 11 postulantes: seis mujeres y cinco hombres. La presidenta interina de la ALD, Mavy Pedraza, confirmó que el procedimiento seguirá el cronograma establecido, que contempla varias etapas entre esta semana y la próxima, hasta el viernes 19, fecha en la que habrá la selección final de las cuatro ternas.
En cambio, la Asamblea Departamental de La Paz informó que hasta el lunes solo un postulante se había inscrito para conformar la terna de candidatos al TED, por lo que invitó nuevamente a los profesionales de distintas áreas a participar antes del cierre de plazo, previsto para este martes a las 20:00 pm. La situación contrasta con la dinámica observada en otras regiones, donde las asambleas departamentales lanzaron convocatorias públicas y reportaron docenas de aspirantes en algunos casos. Un último reporte de este martes señala que ya son 36 los candidatos inscritos.
Las ALD deben elgir de entre cuatro ternas, cada una debe tener representación de género e indígena: cuatro mujeres, cuatro hombres y cuatro representantes indígenas. Por ello, el riesgo no es menor. Las subnacionales requieren trabajo técnico antes de la votación: actualización del padrón, que está en pleno proceso, la organización logística tanto para la elección en la gobernación como en los municipios. Sin TED renovados y operativos, esos procesos quedarían en suspenso.
El escenario más crítico es que algunos departamentos remitan sus ternas y otros no. En ese caso, la ALP podría avanzar parcialmente, pero Bolivia quedaría con un sistema electoral fragmentado, con departamentos que sí logran renovar sus tribunales y otros que permanecen en acefalía. El plazo político se estrecha: si las ternas no llegan a tiempo, la renovación de los TED podría no completarse este año y empujaría al país a un escenario inédito de incertidumbre institucional.