¿Estás pensando en vender tu casa? ¿Sabías que con apenas 8 pequeñas reformas infalibles, podés vender tu casa más rápido y a mejor precio? Solo se necesita una mínima inversión para dejarla en condiciones óptimas. Siguiendo estas recomendaciones podrás lograr una mayor rentabilidad y subir la cotización de tu inmueble alrededor de un 15%.
Lo más importante es conocer nuestro presupuesto y saber cómo aplicarlo. Para tener una idea certera de ello, se puede calcular de la siguiente forma: tomamos en cuenta el precio del metro cuadrado de las viviendas en la zona; por un lado las reformadas, por otro las que están sin reformar.
Obtenemos un promedio de ambas y la diferencia entre esos promedios se divide a la mitad. El resultado será lo ideal para invertir en tu inmueble. ¿Suena complicado? No te preocupes, cuando veas este ejemplo todo será mucho más claro:
Valor del m2 en vivienda reformada: U$S 2.000Valor del m2 vivienda sin reformas: U$S 1.500Diferencia: U$S 500En este caso, nuestra inversión en reformas para una vivienda en esa zona por m2 debe ser de: U$S 250 para que tu rentabilidad sea del 100%.
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Ahora que ya sabemos cuanto invertir, es hora de saber en qué.
¿Cuáles son las reformas que más valorizan tu casa?
1. Integración de espacios:
Si el salón y el comedor están divididos, es buena idea unirlos. También se valora mucho agregar vestidores en los dormitorios y, de ser posible, baño en suite. Todo esto puede incrementar el precio de la propiedad hasta en un 25%.
Algo que también suma es ampliar las habitaciones eliminando los pasillos y aumentar el espacio de almacenaje construyendo armarios empotrados en huecos vacíos.
2. Renovación de pisos:
Pasar lija y barniz en los pisos de madera antiguos que puedan restaurarse. En caso de cambiarlos, colocar pisos flotantes es una buena opción. Para pisos de mármol, empastar y pulir; y en los cerámicos repasar juntas y sustituir las piezas rotas.
3. Cocina y baño nuevos:
Este sector de la casa puede inclinar la decisión de un posible comprador a favor o en contra según las condiciones en las que se encuentren. Un baño y una cocina bien cuidados hacen que el valor de la vivienda suba. En el baño, actualizar las instalaciones de agua es básico, igual que sustitir sanitarios por otros más nuevos. Para los cambios en la cocina se recomienda cambiar los azulejos de las paredes, renovar los muebles y la iluminación. Y lo que más valor agregado le va a sumar es abrir la cocina al salón por completo.
4. Una mano de pintura:
Cada tanto toda casa necesita un «lavado de cara», así se le llama a las reformas más indispensables que se hacen en una casa que se piensa vender. Esto incluye darle una mano de pintura a la vivienda para causar una buena primera impresión. Tené en cuenta que un potencial comprador se decide por una vivienda durante los primeros siete segundos que pasa en ella.
Una buena idea es pintar con colores neutros que aporten calidez y sean impersonales. Usar pinturas minerales (silicato, cal, arcilla o grafeno), que regulan la humedad, resisten los hongos, absorben mejor los olores y ayudan a disipar la contaminación electroestática (causada por electrodomésticos que ionizan el aire generando una atmósfera que a largo plazo puede causar jaquecas y cambios de humor).
5. Iluminación y jardín:
Siempre suma valor que la casa tenga un jardín con plantas bien cuidadas y césped cortado. En cuanto a la iluminación de la vivienda, cambiá las luces por otras que den mayor claridad, y colocá sensores de movimiento para que las luces se vayan encendiendo al caminar por la casa.
6. Ventanas:
Le dará valor a la estructura de la casa mejorar el aislamiento térmico y acústico de las ventanas, y usar vidrios de baja emisividad (minimizan la pérdida de calor) y con cámaras de aire de mínimo 14 milímetros.
7. Tecnología aplicada al hogar:
Hay una ecuación que nunca falla: la vivienda tendrá mayor valor cuanta más tecnología tenga incorporada, sobre todo para los compradores más jóvenes. Por ejemplo, termostatos inteligentes para el control de la calefacción, persianas eléctricas que se abren y cierran en función de la luz exterior, y dispositivos WiFi para controlar estos detalles a distancia desde tu celular o computadora.
8. Terraza:
Una terraza con vista despejada vale más que una con edificios muy cerca y que tapan el paisaje. Obviamente en estos casos no podemos tirar abajo los edificios; así que una reforma que le aporta valor al inmueble es cerrar la terraza e incorporarla a la vivienda. Esto amplía el espacio útil y hace que la superficie cerrada valga entre un 50% y un 80% más que la terraza.
Ahora sí vas a colocar tu propiedad mejor valorizada en el mercado, con más rentabilidad. Lo importante es ser estretégicos e invertir en los aspectos que más puedan diferenciar tu casa para darle mayor valor.