58% de las casas deshabitadas en el país están en el altiplano


A escala nacional, se tienen registradas 182.613 viviendas parcialmente desocupadas, de las cuales 107.467 corresponden al occidente del territorio nacional.

 La migración interna hacia dos regiones del país hizo que del total de las viviendas vacías en el país el 58,8% esté en el altiplano, según datos de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN).Sobre la base del estudio Viviendas vacías en el altiplano de Bolivia, que llevó a cabo la SDSN, se evidencia que la mudanza de las personas, de su poblado natal a otras ciudades, configura un fenómeno conocido como migración incompleta, porque, si bien se establecieron en una región distinta a la de su origen, regresan a ésta con una frecuencia de hasta 10 ocasiones a lo largo del año.“Hay 182.613 viviendas vacías en todo el país, de las cuales 107.467 se encuentran en la región del altiplano. Por los datos, podemos inferir que Santa Cruz, Beni y Pando concentran sólo un 14% de las viviendas vacías, frente al 58,8% de las del altiplano; la migración se da de occidente a oriente”, precisó a Página Siete la directora de Desarrollo de la SDSN, Lily Peñaranda.Para llegar a esta conclusión, los investigadores de la institución analizaron a lo largo de un año la información de más de dos millones de facturas del servicio de energía eléctrica de diferentes localidades del país.“Analizando los datos de los medidores eléctricos residenciales de todo el país, podemos ver que en muchos lugares de Bolivia no se aprovecha bien el acceso a la electricidad. De hecho, alrededor de una cuarta parte de todos los municipios de Bolivia tienen más del 20% de los medidores eléctricos con consumo cero, lo que sugiere que hay viviendas temporalmente vacías”, se precisa en el estudio.En lo que respecta a las dos mayores regiones receptoras de inmigrantes, las ciudades de Santa Cruz de la Sierra y El Alto son las más atractivas para quienes deciden cambiar de residencia.“Santa Cruz de la Sierra y El Alto son punteros, cada uno añade anualmente alrededor de 11.000 nuevas viviendas con medidores residenciales, lo que nos sugiere que hay una dinámica poblacional positiva, reflejada en nuevas viviendas o en viviendas que, sin ser necesariamente nuevas,  ahora cuentan con medidores residenciales”, se explica en el estudio titulado Los municipios más atractivos de Bolivia, de la SDSN.La lectura de las facturas y su incorporación como instrumento de medición fue incluida en el trabajo por la directora ejecutiva de la institución, Lykke Andersen, cuyo equipo revisó entre 2017 y 2018 los datos de 2,2 millones de medidores de energía.“Los datos de los medidores de consumo de energía eléctrica parecen indicar un proceso de migración a medias en Bolivia. Usamos los medidores de luz porque son un instrumento que permite medir diversas dinámicas. Por el consumo se puede medir desde si una vivienda está habitada hasta las condiciones en las que se vive, porque por el consumo por kilovatio se puede medir cuántos equipos electrónicos se utilizan en esa vivienda”, manifestó Peñaranda.Sobre el motivo principal que da lugar a la migración incompleta en el altiplano, los expertos de la SDSN advirtieron desde el clima, que dificulta la actividad agrícola, hasta las leyes sobre la propiedad rural, que sólo puede ser heredada, lo cual causa un proceso de parcelación excesiva.Migración temporal

  •  Servicio En las tierras bajas del país, los porcentajes de medidores con consumo cero están por debajo del 10% (ver el cuadro de la izquierda).
  • Participación En las ciudades capitales, el porcentaje de los medidores con consumo cero oscila entre el 4% y 6%, a excepción de El Alto, donde el porcentaje alcanza el 9%.
  • Actividad Las actividades agrícolas en el altiplano se ven afectadas por el clima seco y frío durante el invierno, por lo que la gente busca otras oportunidades de trabajo en las ciudades, principalmente en El Alto y Santa Cruz de la Sierra.

Fuente: https://www.paginasiete.bo